Un artículo de Carmen Romero,
coordinadora de enfermería de Amavir Arganzuela,
Enfermera Especialista en Enfermería Geriátrica y Experta Universitaria en Cuidado y Curas de Heridas Crónicas por la Universidad de Cantabria
Definiremos una úlcera por presión como “una lesión isquémica producida por una presión sostenida entre dos planos duros: por un lado una prominencia ósea y por el otro la superficie de apoyo, impidiendo así las llegada nutrientes y oxígeno a la zona, por lo que se produce daño y destrucción de la piel y tejidos subyacentes”.
La prevalencia de las úlceras por presión (UPP) en ancianos institucionalizados es un tema muy importante a la hora de elaborar planes de cuidados de enfermería. Las UPP representan un importante problema de salud pública que afecta a millones de personas en todo mundo, existe una disminución de la salud, la calidad de vida y pueden incluso derivar en una discapacidad o muerte.
Por eso debemos conocer y especificar las características de nuestros pacientes con úlceras por presión, así como los aspectos relacionados con las estrategias y prácticas de prevención de las mismas. Dentro de este tipo de lesiones hay que diferenciar las producidas por:
- Presión: entre dos planos duros.
- Fricción: fuerza tangencial que actúa paralelamente a la piel, se producen con los roces de movimientos o arrastres, por ejemplo en pacientes encamados.
- Cizallamiento: Combina los efectos de presión y fricción. Por ejemplo sentado en la cama la zona sacra.
- Humedad: La incontinencia es un factor de riesgo 22 veces mayor respecto al paciente que no la presenta. Los tejidos se maceran y facilitan la aparición de lesiones.
¿Qué factores influyen a la hora de la formación de UPP?
- FACTORES INTRÍNSECOS
los que dependen del paciente como la condición física, Alteraciones respiratorias/circulatorias, Diabetes, Insuficiencia cardiaca, anemia, Edad o nutrición. - FACTORES EXTRÍNSECOS
- aquellos ajenos a la persona como la humedad, estancia, superficie de apoyo, fijaciones o férulas.
¿Cuáles son las zonas de riesgo de aparición de UPP?
- Decúbito supino: parte baja de la cabeza, Omoplatos, sacro, codos y talones.
- Decúbito lateral): orejas, hombros, costillas, trocánter,exterior e interior de las rodillas (Cóndilos) y tobillos (maléolos externos).
- Sentado: Omoplato, sacro, parte interna de los glúteos (tuberosidades isquiáticas), parte interna de las rodillas y pies.
¿Cómo se clasifican las UPP según la profundidad y tejido afectado?
- CATEGORÍA I:
eritema por presión no blanqueante con piel íntegra. - CATEGORÍA II:
pérdida parcial del espesor de la piel o ampolla. - CATEGORÍA III:
pérdida total del grosor de la piel sin llegar a la fascia subyacente. - CATEGORÍA IV:
pérdida total del grosor de la piel. Necrosis del tejido o lesión en músculo, hueso o estructuras de sostén como el tendón o la cápsula articular.
¿Cómo prevenir las UPP?
La localización precoz de cualquier enrojecimiento de la piel es la mejor cura.
- Tener la piel limpia e hidratada.
- Cremas barrera para evitar lesiones por humedad.
- Sábanas y ropa de algodón.
- Almohadas para repartir el peso del cuerpo y así evitar la presión excesiva en las prominencias óseas.
- Dieta rica en proteínas y líquidos.
- Realizar cambios posturales cada dos o tres horas si está encamado utilizando los tres decúbitos: derecho, izquierdo y supino (si fuera posible también prono); y cada 15 minutos si está en silla elevaremos por debajo de las axilas y cambiaremos levemente la posición.
- Colchones antiescaras de aire o agua.
- Cojines antiescaras de viscolátex o gel y evitaremos cojines tipo “rulo” o “donut”.
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EXCELENTE APOYO INFORMATICO COMPLETO Y RESUMIDO, ME HUBIESE GUSTADO QUE SE MANEJARAN GRAFICAS CONSIDERANDO EDAD, SEXO Y POSTURAS.