Un artículo de Amanda Librero, Psicóloga de Ballesol Las Palmas
El envejecimiento de la población puede acentuar situaciones de soledad, pero existen otros factores sociales y estructurales como cambios en nuestra forma de vida, sociedades más “compartimentadas” e individualistas, ritmos de vida más acelerados, crecimiento de las ciudades y la despoblación del medio rural en España, que han contribuido al notable aumento de situaciones de soledad entre las personas mayores, pero también en otros tramos de edad.
Concretamente, en nuestro país son ya más dos millones de personas mayores de 65 años que viven solas en España. En el caso de las personas que viven en las residencias, pueden experimentar sensación de soledad a pesar de estar acompañadas, o se llegan a aislar.
Las Actividades Asistidas con Perros tienen efectos positivos a nivel emocional en las personas mayores:
- Fortalecen la autoestima
- Mejoran el estado de ánimo y aumentan la motivación
- El contacto físico con el perro, las caricias y abrazos que él recibe, y el vínculo emocional, que sesión tras sesión se genera entre la gente mayor y los perros, ayuda a reducir su sentimiento de soledad
- Los perros de actividades asistidas son además facilitadores sociales, aumentan el contacto y relación entre las personas.
- Las actividades Asistidas con perros también estimulan la memoria y el aprendizaje
No sólo se han encontrado beneficios con las actividades asistidas con perros, ya que los animales de cuatro patas son beneficiosos en la vejez. Así lo asegura un estudio de la Universidad de Florida publicado recientemente. Dicho estudio se llevó a cabo con 1400 personas. Los participantes vivían con una mascota, sobre todo perros y gatos. Las conclusiones fueron que el deterioro fue menor y más lento. Eso sí, para adoptar un animal también hay que tener en cuenta que debe implicar la responsabilidad de su cuidado
En la residencia Ballesol Las Palmas la Asociación TERAPICAN llevó a cabo el proyecto “Compartiendo vida”, subvencionado por el Gobierno de Canarias. En este proyecto se realizaron actividades asistidas con perros. Los beneficiarios fueron 17 residentes, y la duración fue de 4 sesiones, dentro de los cuales se dieron dos actividades complementarias.
Se trabajó en dos sesiones, con la ayuda del perro, el bienestar animal y la tenencia responsable de animales (alimentación adecuada, vacunas, necesidades de los perros.). En resumen, el cuidado básico de un perro.
Actividades en residencias
Respecto a las dos actividades complementarias, en una sesión los residentes realizaron ejercicio físico con el perro con unos aros, y en otra pintaron mandalas de perros en el que los mayores pudieron hacer un trabajo de reminiscencia sobre las mascotas que han tenido a lo largo de su vida y recordar los beneficios que tuvieron al tener dichas mascotas. También realizaron un mordedor de perros en parejas, trabajando la psicomotricidad fina y favoreciendo la relación entre los residentes.
Hemos observado en las actividades que algunas personas mayores animan a hablar entre sí y reírse juntos durante la terapia. Esto ayuda a la disminución del sentimiento de soledad. También ha servido para desconectar de los pensamientos negativos de inutilidad que experimentan algunos mayores en la vejez, debido a que están experimentando sensación de bienestar en las actividades asistidas con el perro
Envejecer al lado de un perro
- Katia Mas Borrego, Trabajadora Social de Ballesol Las Palmas
El trabajo social y las actividades asistidas con perros están estrechamente relacionados. El primero pretende fomentar el envejecimiento sano y activo a través del mantenimiento de sus capacidades y, desde la actividad de terapia con perros que se llevó a cabo en el centro, se pretendió mejorar el estado ánimo, así como estimular la mente y la memoria.
Por lo tanto, ambas partes tienen una función promocional, es decir, fomentar la participación activa del mayor, la cual es de vital importancia para velar por la calidad de vida de las personas mayores.”
- Herenia Frigolet, animadora sociocultural de la residencia Ballesol Las Palmas
Este tipo de actividades asistidas con animales posee efectos beneficiosos sobre la orientación temporal y espacial, favoreciendo las dinámicas de grupo entre los residentes que asisten a dicha actividad con el perro, como un lugar de conversación y brindando un abanico inmenso de actividades lúdicas. Se rompe la monotonía de los mayores en las residencias ya que el cariño y la lealtad de los animales es muy reconfortarle para ellos, evitando el aislamiento comunicativo.