Un artículo Almudena Casellas Azcárraga, Priscila Correa Bolaños, Cristina Pintor Lucas, Daniel Espejo Cuello y Alicia Ortega Horcajo, equipo de Terapia Ocupacional del centro residencial Los Nogales Hortaleza

La terapia ocupacional es una ciencia sociosanitaria fundamental para fomentar la autonomía e independencia de las personas mayores, especialmente de quienes sufren algún tipo de daño cognitivo y tienen alguna dificultad para realizar acciones cotidianas.

En Los Nogales Hortaleza contamos con módulos funcionales en las que conviven mayores dependiendo de sus características cognitivo – funcionales. Una vez emitido el diagnóstico de deterioro cognitivo por un equipo de psicología y la valoración funcional realizada por el equipo de terapia ocupacional, estos profesionales ofrecen programas terapéuticos adaptados a las características de cada grupo para enfrentar y ralentizar las consecuencias del deterioro cognitivo.

Además, estos programas terapéuticos se adaptan a las necesidades específicas de cada persona, a su respuesta ante las terapias y a la evolución que desarrolle. Algunos de los programas de terapia ocupacional con éxito contrastado en los más de 40 años de trayectoria de Los Nogales son:

• Estimulación cognitiva

Sirve para potenciar el conjunto de las funciones ejecutivas por medio de técnicas que se ponen en práctica en grupo, como las reminiscencias, el cálculo o la orientación a la realidad, un conjunto de métodos que permiten que la persona tome conciencia de su situación en el tiempo, es decir, potencie su orientación temporal; en el espacio, lo que incrementa su orientación espacial y respecto a su propia persona, desarrollando lo que se considera orientación personal.

También se puede activar la estimulación cognitiva a través del uso de distintos materiales, como fichas cognitivas y puzles, o mediante ejercicios orales o escritos. Los objetivos de esta terapia son muy diversos: mantener las capacidades cognitivas el máximo tiempo posible, compensar los déficits sensoriales, estimular la memoria, la atención, las funciones ejecutivas y la propia identidad de la persona y fomentar sus relaciones sociales y su adaptación al entorno.

• Nuevas tecnologías

El uso de nuevas tecnologías es uno de los talleres terapéuticos más novedosos e innovadores. Debido a su creciente importancia en las actividades diarias se ha convertido en una terapia muy destacada para aquellas personas que mantienen sus capacidades cognitivas. De este modo, se sienten más integradas en la sociedad actual, así como al corriente de los últimos avances y en contacto con los dispositivos tecnológicos. 

• Rehabilitación funcional

Funciona para encontrar y adaptar algunas acciones cotidianas a las características de la persona y que esta conserve una buena calidad de vida y la mayor independencia posible para realizar las actividades propias de la vida diaria. Esta terapia requiere el uso de material con potencial terapéutico que permita trabajar la motricidad fina, las destrezas manipulativas y la coordinación óculo-manual del residente.

• Motricidad fina

Busca la motivación y concentración de la persona mayor en una tarea determinada con el objetivo de mejorar su disposición y alcanzar la máxima independencia. Además de estimular la motricidad fina, con estas actividades se pretende rehabilitar y/o mantener la funcionalidad de los distintos tipos de pinza y la coordinación óculo – manual, así como mejorar y/o mantener el rango de movilidad articular y la fuerza muscular. Para llevarla a cabo utilizamos herramientas como pinzas, puzles, bloques de construcción, dibujo, etc. 

• Psicomotricidad y gerontogimnasia

Para mantener las capacidades físicas y mejorar la autonomía se recomiendan actividades de esta índole. Para la gerontogimnasia se realiza una tabla de ejercicios donde se movilicen tanto miembros superiores como inferiores, trabajando coordinación y equilibrio. Se realiza en sedestación.

Por otro lado, la psicomotricidad es una técnica que tiende a favorecer el dominio del cuerpo, la relación y la comunicación con uno mismo y con los objetos y personas que le rodean. Se aplica teniendo en cuenta tres esquemas: corporal, espacial y temporal. A través de estos ejercicios buscamos también estimular la motricidad fina, gruesa y cruzada o ejercitar la capacidad de caminar y mantener el equilibrio.

• Reentrenamiento de las actividades de la vida diaria

La finalidad de esta terapia es lograr que la persona pueda volver a realizar sus actividades cotidianas tradicionales, conservando la mayor independencia o, en algunos casos, reeducar pautas para su realización o bien buscar alternativas para realizarlas. Esta actividad va dirigida a aquellas personas que por diferentes causas hayan dejado de realizar actividades básicas de la vida diaria y tengan capacidad para realizarlas.

• Intervención terapéutica

Es un completo programa compuesto por la realización de actividades de estimulación cognitiva, motricidad fina y rehabilitación funcional. Está dirigido a las personas con cierto grado de deterioro cognitivo y con ciertas alteraciones conductuales. Es un conjunto de actividades que se realizan en función del clima ambiento-conductual en el que se encuentren.

• Estimulación sensorial

Con estas prácticas abordamos al residente que no es susceptible de otras terapias por su alto grado de deterioro cognitivo, consiguiendo evoluciones altamente positivas a través de la relajación y de la estimulación multisensorial. El objetivo principal es establecer una relación (a nivel verbal y/o no verbal) y evitar la desconexión del medio.

Para llevarla a cabo empleamos herramientas como las movilizaciones pasivas o la utilización de sonidos y música. Con ello buscamos enlentecer la atrofia corporal, retrasar las espasticidades o estimular la percepción por medio del tacto y el oído entre otros.