Un artículo de Miaudífono
En los últimos años, el cuidado de la salud mental ha cobrado un merecido protagonismo. Todas o casi todas las personas nos preocupamos por mantener nuestro bienestar físico y cada vez más también el mental. Sin embargo, existe una conexión entre la salud auditiva y la salud mental que a menudo pasa desapercibida.
La pérdida auditiva no tratada puede tener un impacto significativo en la salud mental de una persona y este problema es más común de lo que pensamos y puede afectar a personas de todas las edades, pero sobre todo a personas mayores.
Se manifiesta en diferentes grados, desde dificultades leves para escuchar hasta una pérdida auditiva profunda. A menudo, la pérdida auditiva se desarrolla gradualmente, lo que hace que las personas no sean conscientes de su deterioro auditivo.
¿Conoces los signos de la pérdida auditiva?
En nuestra vida cotidiana, a menudo pasamos por alto estos indicios, podemos pensar que son manías, malas prácticas o simples malentendidos en la comunicación. Sin embargo, nuestros familiares y amigos también suelen ser los primeros en notar estás señales. Si tú o alguien de tu entorno experimenta lo que podrías considerar ‘manías’, es el momento de tomar medidas. ¿Cómo lo vas a notar?
- Dificultad en conversaciones. Las personas con pérdida auditiva a menudo encuentran difícil seguir conversaciones, especialmente en entornos ruidosos. Por ejemplo, pueden pedir constantemente a otros que repitan lo que han dicho.
- Volumen de la televisión, radio o móvil elevado. Aumentar el volumen de estos dispositivos a niveles incómodamente altos es un indicador común de pérdida auditiva.
- Problemas al hablar por teléfono.
- Pérdida de sonidos cotidianos como el timbre de la puerta, el teléfono o el despertador.
- Aislamiento social. Las personas pueden sentirse frustradas o deprimidas. La dificultad para comunicarse con éxito puede aumentar los niveles de ansiedad, ya que las situaciones sociales se vuelven estresantes y abrumadoras.
Claves contra la pérdida auditiva
La buena noticia es que existen soluciones para abordar tanto la pérdida auditiva como sus efectos en la salud mental. Es el caso de las revisiones auditivas y los audífonos personalizados. Buscar apoyo psicológico también puede ser beneficioso para manejar las emociones relacionadas con la pérdida auditiva. Además, educar y concienciar a familiares y amigos puede crear un entorno de apoyo.
Actualmente existen audífonos de última generación que mejoran la salud auditiva y calidad de vida de todas las personas que sufren pérdida auditiva. Estos audífonos se adaptan según las necesidades personales del paciente. Es importante recalcar que según la Asociación Nacional de Audioprotesistas en su Estudios sobre la Satisfacción de usuarios de audífonos Eurotrak 2023, el 79% de los usuarios de audífonos están satisfechos con sus audífonos.
Beneficios de usar audífonos
La tecnología de los audífonos ha avanzado considerablemente y algunos de los beneficios de usar audífonos incluyen:
- Comunicación efectiva. Los audífonos permiten a las personas con pérdida auditiva participar activamente en conversaciones y comunicarse de manera efectiva en situaciones cotidianas y sociales.
- Aumento de la confianza. Recuperar la capacidad de escuchar claramente puede impulsar la confianza en uno mismo. La autoestima mejora al poder participar plenamente en actividades y relaciones sociales.
- Mejora en la calidad de vida. Con los audífonos, las personas pueden disfrutar de experiencias que antes les eran difíciles como participar en eventos sociales, disfrutar de la música, ver películas o simplemente mantenerse al tanto de los sonidos del entorno.
- Seguridad. Permiten escuchar señales de advertencia, como el claxon de los coches, alarmas y sirenas, reduciendo el riesgo de accidentes.
Consecuencias de no tomar medidas sobre la pérdida auditiva
La pérdida auditiva no tratada puede tener serias repercusiones en la vida de una persona. Algunas de las consecuencias de no abordar este problema incluyen conflictos relacionales, donde las dificultades para escuchar y comunicarse pueden generar tensiones en las relaciones personales, resultando en malentendidos y falta de comunicación efectiva. Además, existe un riesgo de deterioro cognitivo, ya que estudios han demostrado que la pérdida auditiva no tratada está relacionada con un mayor riesgo de deterioro cognitivo y demencia. La falta de estimulación auditiva puede afectar la salud del cerebro a lo largo del tiempo.
En conclusión, tomar medidas para abordar la pérdida auditiva, con el uso de audífonos o ayuda profesional, es fundamental para mantener una vida plena y saludable. Además de mejorar la comunicación, también contribuye a un mayor bienestar emocional y social, y puede prevenir efectos negativos a largo plazo en la salud mental y cognitiva.