Un artículo de Accent Social
La enfermería geriátrica es la especialidad que se dedica al cuidado integral de las personas mayores. Este campo es crucial en el contexto de una población global que está envejeciendo rápidamente. Esta rama no solo aborda las necesidades físicas, sino también las psicológicas, sociales y emocionales de las personas a las que atiende, promoviendo su bienestar y calidad de vida.
La importancia de la enfermería geriátrica
La población mundial está envejeciendo a un ritmo acelerado. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que para el año 2050, la población mayor de 60 años se habrá duplicado, alcanzando los 2.100 millones. Este cambio demográfico trae consigo una serie de retos para los sistemas de salud de todo el mundo.
En este contexto, el cuidado especializado y holístico dirigido a satisfacer las necesidades de salud de las personas de edad avanzada, es crucial. Y los profesionales en este campo juegan un papel vital en la prevención de enfermedades, el manejo de la salud a largo plazo, y en el apoyo a las personas mayores para que mantengan una vida independiente y activa tanto como sea posible.
6 funciones en las que la enfermería geriátrica es crucial
El personal de enfermería geriátrica, presente en una gran variedad de entornos, incluyendo hospitales, residencias para mayores, clínicas de atención primaria, y en domicilios particulares, como es el caso de Accent Social, realiza funciones diversas que incluyen:
- Evaluación integral de la salud, abarcando aspectos físicos, mentales, emocionales y sociales mediante la revisión de historiales médicos, la realización de exámenes físicos y el chequeo de la capacidad funcional y cognitiva de los pacientes.
- Desarrollo de planes de cuidado personalizados basados en las necesidades específicas de cada persona, ajustándose regularmente para adaptarse a los cambios en su estado de salud y asegurarse que recibe la atención más adecuada posible.
- Administración de medicamentos y tratamientos según las indicaciones médicas, vigilando también la aparición de posibles efectos secundarios.
- Educación sobre salud y prevención de enfermedades, promoviendo hábitos relacionados con la nutrición, el ejercicio y el abordaje de múltiples enfermedades.
- Apoyo emocional y psicosocial, ayudando a las personas mayores a enfrentar los desafíos asociados con el envejecimiento.
- Coordinación con otros profesionales de la salud para proporcionar una atención integral y coordinada, así como garantizar que la comunicación sea efectiva entre todos los equipos que intervienen en el cuidado de las personas mayores.
Retos y oportunidades
La enfermería geriátrica enfrenta retos únicos, como el manejo de la polifarmacia, la comunicación con pacientes que pueden tener dificultades cognitivas, y la colaboración en el cuidado con las familias y cuidadores. Sin embargo, también ofrece oportunidades para mejorar la calidad de vida y para innovar en el cuidado a través de la investigación y la educación continua.
Ante esta realidad, desde Accent Social queremos resaltar que, a medida que la población envejezca, la demanda de enfermeros y enfermeras geriátricos seguirá creciendo, lo que representa una llamada a la acción para asegurar que la sociedad pueda atender adecuadamente las necesidades de sus miembros más mayores y que estos reciban la atención y el apoyo que necesitan en esta etapa de sus vidas.