El progresivo envejecimiento de la población unido a factores ambientales, tóxicos o dietéticos, está provocando un aumento de cáncer colorrectal, tal y como indica el Dr. Josep Just, especialista en digestología y responsable de la unidad de endoscopia digestiva de Creu Blanca.


“El cáncer colorrectal supone, por su incidencia, un problema de salud importante para la población. Presenta una tendencia a aumentar en los registros de los países desarrollados y es ligeramente más frecuente en el sexo masculino y la localización más frecuente es el recto y la región sigmoidea, entre ambos un 65% aproximadamente”, destaca el Dr. Just.

geriatricarea cancer colorrectal Josep Just
El Dr. Josep Just destaca que en los últimos años se ha mejorado el pronóstico del cáncer colorrectal y ha disminuido la mortalidad gracias a un diagnóstico precoz


 
El cáncer colorrectal es el más frecuentemente diagnosticado en la población española (15% del total, 34.331 casos detectados en 2017), seguido por el cáncer de próstata (13%), pulmón (12%) y mama (11%), según datos del datos del Observatorio del Cáncer de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC).


Este tipo de cáncer varias formas de presentación, siendo la esporádica la más frecuente, aunque también está relacionado con los antecedentes personales previos de pólipos de colon, cáncer colorrectal o enfermedad inflamatoria intestinal, y con los antecedentes familiares de cáncer colorrectal (especialmente familiares de primer grado), además de otros síndromes que aumentan el riesgo de padecerlo (Sindróme de Linch o poliposis adenomatosa familiar), apunta este especialista.


“En los últimos 20 años ha mejorado el pronóstico y ha disminuido considerablemente la mortalidad gracias a un diagnóstico precoz que permite la detección de tumores en estadios iniciales sin diseminación regional ni metástasis a distancia”, explica responsable de la unidad de endoscopia digestiva de Creu Blanca.


Pero para que este diagnóstico precoz sea efectivo, la población general sin factores de riesgo (ni personal ni familiar) debe iniciar sus controles a partir de los 50 años y en ese momento se puede plantear la posibilidad de realizar o bien determinación de sangre oculta en heces (SOH), sigmoidoscopia o colonoscopia.


En los casos de historia familiar de cáncer colorrectal, especialmente en familiares de primer grado (padres, hermanos), se realizará siempre colonoscopia y los controles se iniciarán al menos 10 años antes que para el resto de la población (40 años). Si existe historia personal previa los controles se practicarán según la patología asociada y los resultados de cada control y también exclusivamente con endoscopia, comenta el Dr. Just.


La población en general, anterior a la edad de inicio del cribaje o posterior, siempre que presente síntomas que puedan hacer sospechar de la existencia de patología colorrectal (rectorragias, anemia, palpación de masas abdominales, hallazgos sospechosos en alguna exploración de imagen), se debe realizar una endoscopia para completar el estudio y descartar así la posibilidad de estar frente a una patología tumoral colorrectal.


A pesar de que se han propuesto muchos factores implicados en la aparición de este tipo de cáncer, desde Creu Blanca se indica que en la actualidad solo existen evidencias de algunos de ellos sobre los que puede realizarse prevención primaria:

  • Moderar el consumo de carnes rojas, muy procesadas y carnes muy tostadas hechas en contacto con el fuego
  • Hacer una dieta baja en grasas y rica en fibras, frutas y verduras, así como rica en leche y productos lácteos
  • Realizar una ingesta adecuada de folatos, Ca y vitamina D pero no en suplementos
  • No tomar suplementos antioxidantes
  • Hacer ejercicio físico y evitar el sobrepeso
  • Evitar el consumo de tabaco
  • Moderar el consumo de alcohol
  • No administrar AAS (ácido acetil salicílico), AINES (antiinflamatorios no esteroideos) ni tratamientos hormonales de forma sistemática