/p>La Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades de Castilla y León ha aprobado una Orden gracias a la cual 37.000 personas podrán compatibilizar simultáneamente las ayudas a la dependencia que reciben por cuidados familiares con otras ayudas para adquirir un servicio profesional: ayuda a domicilio, promoción de la autonomía personal o centro de día.
Geriatricarea ayudas a la dependencia
Gracias a esta Orden 37.000 personas podrán recibir ayuda económica familiar y ayuda profesional al mismo tiempo

La orden, que permitirá recibir ayuda económica familiar y ayuda profesional al mismo tiempo, establece que las personas dependientes mayores de edad, con grados I, II y III que son beneficiarias de la ayuda económica por cuidados en el entorno familiar tendrán derecho a compatibilizar, de forma simultánea, esa ayuda con otras prestaciones para obtener servicios profesionales: ayuda a domicilio, promoción de la autonomía personal y centro de día públicos o, en su defecto, recibir una ayuda económica para la compra de esos servicios.
Esto supone incrementar en un 5 % las cuantías mensuales que estaban recibiendo antes de la crisis para que puedan adquirir un servicio profesional. De esta forma, un dependiente que tenga ayuda familiar podrá recibir al mes un 24% más en Castilla y León que en otras comunidades autónomas.
Con la nueva orden de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, las personas de grado III que cuentan con cuidados en el entorno familiar percibirán hasta 479 euros al mes, frente a los 388 euros de otras autonomías, para que cuenten también con servicios profesionales. Por su parte, los de grado II pasarán a percibir un máximo al mes de 332 euros (63 euros más que en otras comunidades). Y los de grado I recibirán 189 euros mensuales (36 más que en el resto de España).
En el caso del servicio de ayuda a domicilio, la intensidad dependerá de su grado de Dependencia. En concreto, será de once horas para las personas de grado III, de ocho horas para las del grado II y de cuatro horas para las de grado I. En el caso del servicio de promoción de la autonomía personal y del servicio de centro de día, las intensidades serán equivalentes a la necesaria para alcanzar el nivel de apoyo total de la prestación económica en el entorno familiar que existía antes de la crisis.
El objetivo de estas ayudas a la dependencia es no solo se mejora el nivel de atención tanto de la persona dependiente como del cuidador, sino que se incrementan los apoyos que recibían y se potencian, al mismo tiempo, los servicios profesionales de atención a las personas dependientes y, por tanto, el empleo.