/p>La artrosis genera un grado de incapacidad permanente en más del 55% de los pacientes, con abandono del trabajo antes de la jubilación debido a la enfermedad, y absentismo laboral, tal y como destacaron los expertos reunidos en el marco de la XVI Reunión Multidisciplinar de Expertos centrada en “Dolor en la artrosis”, organizada por la Cátedra Extraordinaria del Dolor “Fundación Grünenthal” Universidad de Salamanca.
Geriatricarea dolor artrosis
La artrosis puede favorecer la aparición de otras enfermedades como la hipertensión, diabetes o colesterol

Una de los principales avances médicos presentados es este foro fue que es posible detectar el dolor en la artrosis a través de resonancias que registran los cambios en la microvasculatura cerebral producidos después de la experiencia álgida, tal y como expuso el doctor Jordi Monfort, del Servicio de Reumatología del Hospital del Mar de Barcelona.
Tal y como recalcó este experto “es relevante visualizar el fenómeno de la sensibilización central al dolor en artrosis. Este comienza con un dolor intenso mantenido en el tiempo que provoca una alteración en el Sistema Nervioso Central (SNC), perpetuando el dolor”.
Esta técnica se une a otras novedades en investigación y tratamiento que se sometieron a análisis en esta Reunión Multidisciplinar de Expertos. Y es que, según ha destacado el doctor Clemente Muriel, director de la Cátedra, es importante generar un debate profundo sobre la calidad asistencial de esta patología y lograr el abordaje integral de la misma.
Más aun teniendo en cuenta que todos los tratamientos para el dolor en la artrosis son sintomáticos, ya que no hay tratamientos aprobados para evitar la progresión de la enfermedad. “Las terapias actuales tienen eficacia clínica escasa y se asocian en ocasiones con efectos colaterales”, afirma el doctor Muriel.
En este sentdo, los expertos reunidos en este foro destacaron la necesidad de trabajar por un abordaje multidisciplinar de la enfermedad, en lugar de limitarse a un tratamiento farmacológico, para mejorar la atención al paciente y su calidad de vida. “El dolor por artrosis tiene tres dimensiones: una sensitiva, caracterizada por la percepción del dolor, otra emocional y una última cognitiva. Un abordaje completo implica estas tres áreas y los profesionales implicados”, explicó el doctor Monfort, que hizo especial hincapié en la relación de la artrosis con enfermedades como la hipertensión, diabetes o colesterol, factores de riesgo cardiovascular que aparecen por la falta de movilidad de la persona afectada.