/p>Los mayores de la residencia Albertia Valle de la Oliva, situada en la localidad madrileña de Majadahonda junto al hospital Puerta de Hierro, pueden disfrutar ya de su huerto terapéutico.
Tal y como se explica desde este centro, los huertos suponen para los mayores un regreso a las actividades que desarrollaron en etapas anteriores de su vida. Son muchos los que han cultivado durante varios años sus propios huertos, y otros han colaborado de forma periódica o puntual en la recogida y cuidado de huertos y cosechas de familiares, vecinos… Es por ello que el cuidado del huerto supone una actividad muy significativa a plantear para los residentes y usuarios del centro de día.

geriatricarea Albertia Valle de la Oliva
“Desde el primer momento fue fácil encontrar a residentes que quisieran colaborar en la tarea. Nuestro huerto además tiene la particularidad de contar con zonas a ras de suelo y zonas elevadas, para que todos puedan acceder a él con mayor facilidad independientemente de su situación funcional”, comentan desde la residencia Albertia Valle de la Oliva.
Su cuidado forma parte de las actividades del departamento de terapia ocupacional. Los primeros días se dedicaron a trasplantar los plantones de tomates, lechugas, cebollas, pimientos, pepinos y berenjenas, colocando carteles con los nombres de las hortalizas plantadas para facilitar la identificación de cada especie. El huerto cuenta con riego automático pero en los días de más calor los mayores han estado atentos de echar una cantidad extra de agua para prevenir que se secara.
A medida que las plantas fueron creciendo, algunas necesitaron guías para favorecer su crecimiento sin que se rompieran las ramas y evitar que los frutos contactaran directamente con la tierra y se estropearan. Los residentes más experimentados en esta materia fueron los que nos indicaron la mejor manera de colocar estos apoyos.
Ahora, tras varios meses de vigilancia y cuidado, se han recogido las primeras cosechas. “Los mayores están encantados con nuestro huerto, y más cuando freímos los pimientos recogidos y pudieron degustarlos. Ahora toca quitar las plantas que ya han terminado su temporada y plantar las correspondientes al otoño”, comentan desde el centro.

Albertia Puertollano apuesta por eliminar la sujeciones

En otro orden de cosas, en la residencia de mayores Albertia Puertollano se ha dado comienzo a la eliminación progresiva de sujeciones que actualmente utilizan sus residentes, favoreciendo que los mayores se sientan libres con mayor movilidad. Para ello, se ha desarrollado una valoración exhaustiva de cada residente para establecer las necesidades tiene cada uno y fijar unos objetivos para cubrirlas.
geriatricarea Albertia PuertollanoLa intervención se está basando básicamente en cambiar las sujeciones físicas por terapias no farmacológicas efectivas, ya que para evitar las caídas no es necesario una contención. “Lo que se debe hacer es abordar las patologías de los residentes desde un punto de vista más terapéutico, incluyendo al mayor en terapias no intrusivas y que no vulneren su libertad”, afirman desde esta residencia.
Una de estas terapias se basa en la musicoterapia, ya que se ha comprobado que a través de la estimulación sensorial con música se puede disminuir las conductas disruptivas y la agitación psicomotriz asociada con frecuencia a la demencia. También se ha reforzado la rehabilitación física completa para que los residentes con alto riesgo de caída mejoren su movilidad y su deambulación.
Con estas medidas se contribuye a la mejora de la calidad de vida y el bienestar de los mayores, y se aumenta su autoestima y motivación. Los mayores se sienten así más libres y con más oportunidades de tratamiento, sin necesidad de recurrir a la química para que se sientan tranquilos.
Para completar este proceso, durante los próximos meses la residencia para mayores Albertia Puertollano comenzará a aplicar otros tipos de medidas guiados por profesionales en la materia para conseguir ser una residencia libre de sujeciones.