Consciente de que evitar las sujeciones químicas o impedir la prescripción inadecuada de psicofármacos en personas mayores con demencias es todavía una asignatura pendiente de muchas residencias, la Fundación Maria Wolf ha desarrollado la metodología de aplicación de los Criterios CHROME, un sistema ideado para supervisar la aplicación y el uso de estas sustancias con la ayuda de terceros.


Los Criterios CHROME (acrónimo inglés de Metodología para la Evitación de Sujeciones Químicas – CHemical Restraints avOidance MEthodology) han sido desarrollados para evitar la potenciales efectos secundarios de los psicofármacos entre la población anciana con demencias tipo Alzheimer, entre los que se encuentran las caídas y fracturas óseas o las infecciones como las neumonías y los infartos, los cuales implican una mayor mortalidad y una pérdida innecesaria de calidad de vida.

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La aplicación de los Criterios CHROME evita las sujeciones químicas y la prescripción inadecuada de psicofármacos


Así, la sujeción química es denominada por los Criterios CHROME como una administración inadecuada de psicofármacos administrados por conveniencia organizativa o sin un diagnóstico neuropsiquiátrico. En países como España son muchas las residencias que precisan, por razones organizativas, que los mayores permanezcan en cama al menos 12 horas (4 o más horas de las adecuadas), y muchas de estas personas no padecen insomnio o alteraciones del sueño que pudieran justificar estos fármacos. También se denomina sujeción química a la administración de fármacos sedantes a personas que reclaman atención o manifiestan conductas que molesten al entorno.


Tal y como indican desde la Fundación Maria Wolf, es completamente erróneo asumir que este problema se debe en exclusiva a los médicos. También está la presión social tanto de los gestores de los centros, como de otros profesionales que erróneamente exigen soluciones médicas a problemas que no son médicos, sino de convivencia o debidos a un modelo de gestión residencial obsoleto: hacinamiento, falta de personal, desconocimiento de Terapias No Farmacológicas que pueden evitar o complementar el uso de psicofármacos, ajustes organizativos de los centros, formación del personal, etc.


También los familiares de los residentes son en parte responsables de estas prácticas por su influencia en los especialistas para obtener fármacos o dosis más sedantes sin ser conscientes de los efectos adversos ni de la carga adicional que suponen los posibles efectos secundarios en el cuidado (caídas, incontinencia, complicaciones médicas, etc.).


Y a esto hay que sumar la frecuente falta de coordinación entre los especialistas que pautan estos fármacos y los médicos de las residencias que podrían ajustar o retirar los tratamientos innecesarios o ineficaces.
Por todo ello, la Fundación Maria Wolff, junto con un panel de prestigiosos expertos, han creado los Criterios CHROME que permiten resolver de modo integral los retos médicos, farmacéuticos, organizativos y legales para la evitar las sujeciones químicas y fomentar la prescripción de psicofármacos de calidad. En su diseño han intervenido profesionales de disciplinas como la geriatría, la neurología, la psiquiatría, la psicología, la farmacia, la gestión de centros y el derecho.


La puesta en marcha de los Criterios CHROME se lleva a la práctica de manera sencilla: en una primera fase se forma al personal sanitario y directivo de los centros en los Criterios CHROME. Después se revisan todas las prescripciones farmacológicas de los residentes del centro y se ajustan a dichos criterios. El proceso culmina con la verificación del cumplimiento de los Criterios CHROME por médicos externos recomendados por la Confederación Española de Asociaciones de Familiares de Personas con Alzheimer y otras Demencias (CEAFA).

geriatricarea Criterios CHROME Fundación Maria Wolf Ruben Muñiz
Para Ruben Muñiz el uso de fármacos óptimos obliga a los equipos asistenciales a mejorar la atención


Y es que las residencias que se comprometen con una prescripción de calidad logran una mejora sensible de la vida de los residentes. Es más, tal y como afirma el Dr. Juan Luis Beltrán Aguirre, vicepresidente de la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria, «la parte jurídica de los Criterios CHROME evidencia que el uso de ‘sujeciones químicas’ no tiene amparo en la Constitución Española y en las leyes, y que el uso inadecuado de psicofármacos puede acarrear responsabilidades legales«.


En este sentido, para Manuel Martín Carrasco, psiquiatra y presidente del Consejo Europeo de Sociedades Psiquiátricas Nacionales de la Asociación de Psiquiatría Europea y coordinador de auditorías de los Criterios CHROME de CEAFA, “con los Criterios CHROME ya no hay excusa para mirar hacia otro lado en temas de prescripción de psicofármacos ya que incluyen todos los elementos necesarios para garantizar una prescripción de calidad evitando de ese modo cualquier sujeción química y efectos adversos innecesarios”.


“Los criterios suponen un paso importante para ayudar a los médicos a diagnosticar adecuadamente a los residentes y optimizar el tratamiento farmacológico o evitarlo”, comenta Javier Olazarán, neurólogo y director científico de la Fundación Maria Wolf.


Por su parte, Ruben Muñiz, director de investigación y coordinador ejecutivo del proyecto, asegura que “el uso de fármacos óptimos obliga a los equipos asistenciales a mejorar la atención porque con los psicofármacos pueden enmascarar otros problemas médicos, organizativos o asistenciales. De este modo, las familias ven con frecuencia a sus seres queridos más despiertos o comunicativos. Las empresas realmente interesadas en ofrecer garantías de calidad médico-asistenciales a sus residentes tienen en los Criterios CHROME una oportunidad para mostrar públicamente su compromiso con los residentes, dado que CEAFA puede auditar y acreditar la calidad de las prescripciones”.


Además, la aplicación de esta metodología puede generar un ahorro de psicofármacos en residencias de unos 11 millones de euros anuales, sin contar los costes indirectos por caídas e ingresos en urgencias, que bien podrían multiplicarse, destaca Ana Rigueira, farmacéutica miembro del panel de expertos.