Un aspecto relevante que quiero poner de relieve se refiere a la programación de acciones de sensibilización y de desarrollo de la empatía. Es importante que vayan vinculadas y den paso a acciones de mejora concretas, evitando que este tipo de acciones de sensibilización inicial de equipos hacia la ACP queden simplemente en eso.
Si se programan aisladamente, se corre el riesgo de que aunque se genere una predisposición inicial positiva, ésta pierda pronto su efecto e incluso se llegue a generar cierta “habituación” que dificulte posteriores intervenciones por no haber sido canalizada hacia cambios concretos en la praxis cotidiana.
Otro asunto que considero importante destacar es cuando los equipos o profesionales concretos no perciben la necesidad de cambio. Cuando esto sucede, cuando alguien no percibe que es necesario modificar algo (los motivos pueden ser variados) es difícil que la disposición al cambio y el esfuerzo/compromiso individual que el progreso hacia la ACP requiere, se produzca. Conocer y utilizar algunas estrategias y técnicas dirigidas tanto a la reflexión individual como compartida pueden resultar de interés.
Técnicas como la de los “Momentos Ahá” donde en un espacio grupal se verbalizan y comparten las vivencias personales sobre sucesos concretos que a modo de “toque de alerta” nos hace darnos cuenta de que algo hay que cambiar, pueden ser estrategias muy potentes para poner en común sentimientos de necesidad de cambio, que en ocasiones se producen pero tienden ser minimizados u olvidados.
También los chequeos o revisiones participativas están mostrando ser de ayuda para que los equipos analicen y tomen conciencia de la situación real de los centros. El chequeo de los procesos de atención cotidiana, al que ya dediqué un post anterior titulado ¿y esto ya lo hacemos?, es una estrategia con capacidad para ello.
Otra técnica recomendada es llevar a cabo una revisión del lenguaje que se utiliza en cada organización o centro. Ello nos ayuda a ser conscientes de cómo es nuestra cultura organizativa, de identificar cuáles son los conceptos y creencias sobre las personas y la atención y reflexionar cómo esto influye en la atención del día a día.
Un ejercicio de gran poder para suscitar debate y reflexión es elaborar una lista de los términos utilizados y analizar si indican lejanía o cercanía al modelo ACP. En los términos que muestren lejanía, intentar además buscar “traducciones” desde expresiones que respeten los valores de la ACP. El lenguaje, vehículo del pensamiento, es una herramienta con gran capacidad para transformar los conceptos, creencias y valoraciones que tenemos sobre las cosas, personas y situaciones que en el día a día nos acompañan.
El chequeo del ambiente físico también aporta elementos de análisis para avanzar hacia las propuestas de la ACP. Instrumentos como el Dementia Design Audit Tool, creado por el Dementia Services Development Center de la Universidad de Stirling son de enorme interés tanto para sensibilizar y formar a los equipos profesionales sobre la influencia del espacio físico en el bienestar de las personas como para proponer medidas de mejora ambiental concretas.
¿Dificultades y resistencias en el viaje hacia la ACP? Muchas, variadas y en ocasiones, recurrentes. ¿Posibilidad de convertirlas en consideraciones y aportaciones valiosas a lo largo del proceso de mejora? Sin duda. Insisto en recordar algunos “ingredientes” fundamentales para avanzar en este viaje sin fin hacia la ACP: liderazgo desde la creencia que es posible, formación y apoyo a los profesionales, una ruta de progreso propia asumible, creatividad, ilusión y rigor.
Sobre la autora: Teresa Martínez Rodríguez
Teresa Martínez Rodríguez es psicóloga y experta en gerontología social. Autora de distintas publicaciones en el ámbito de la gerontología aplicada, entre ellas la guía para profesionales La atención gerontológica centrada en la persona, editada en el 2011 por el Departamento de Empleo y Asuntos Sociales del Gobierno del País Vasco y de la web www.acpgerontologia.net
Colabora con el Instituto Gerontológico Matía en la elaboración de materiales de apoyo para la difusión y aplicación del modelo de atención centrada en la persona, en la sensibilización/formación de profesionales y en el diseño y validación de instrumentos de evaluación de servicios, y con Fundación Pilares para la Autonomía en la difusión del modelo y la sensibilización/ formación de profesionales.