Por la especial vulnerabilidad de las personas de edad avanzada, las residencias deben de estar especialmente atentas a prevenir posibles brotes de legionela, una enfermedad especialmente activa en verano debido a las altas temperaturas. Además, son muchas las residencias enclavadas en edificios que, por su antigüedad o falta de mantenimiento, presentan en sus instalaciones diversas patologías asociadas al paso del tiempo, algunas de las cuales pueden fomentar este problema de salud.
Por ello, desde la Comisión Técnica de AEFYT, Asociación de Empresas del Frío y sus Tecnologías se recuerdan las claves para un correcto mantenimiento de los equipos de riesgo: inspección, limpieza y desinfección.
Los programas de mantenimiento que afectan a los diferentes equipos e instalaciones tienen como objetivo controlar las condiciones que favorecen las altas concentraciones de Legionela en instalaciones de agua caliente sanitaria, piscinas, spas, nebulizadores, fuentes públicas y equipos de refrigeración evaporativa. Estas son:
- Temperatura: la bacteria no se multiplica por debajo de los 20 grados aunque siga viva, mientras que por encima de los sesenta no sobrevive.
- Nutrientes: en la instalación deben existir nutrientes que permitan la multiplicación de bacteria, es decir, sedimentos, lodo, restos de corrosión, etc.
- Refugios: el lodo, las películas biológicas y las incrustaciones pueden ofrecer abrigo al crecimiento de la Legionella.
Una correcta inspección, limpieza y desinfección de las diferentes instalaciones impedirá la reproducción de cualquiera de estas circunstancias en los diferentes equipos de riesgo. Y es que, tal y como apunta Manuel Lamúa, gerente de AEFYT, “es de máxima importancia respetar las labores de mantenimiento en los equipos de riesgo de alojar la bacteria de la legionela y, además, hay que recordar que éstas se deben desarrollar a lo largo de todo el año. Se puede decir que la legionela se previene en invierno”.
En concreto, los equipos de refrigeración evaporativa resultan seguros con un correcto mantenimiento pero, además, AEFYT recuerda la necesidad de extremar las precauciones con otros equipos de riesgo, como son los spas o nebulizadores muy usados en la época estival.
En el caso de los equipos de refrigeración evaporativa, los recientes avances técnicos que han implementado son una garantía más de seguridad. Además de los altos índices de eficiencia energética que presentan, una consecuencia secundaria de la modernización del parque de equipos de refrigeración evaporativa es facilitar su mantenimiento y, por tanto, la seguridad sociosanitaria.
Los desarrollos técnicos destinados a optimizar el mantenimiento de las torres de refrigeración son, en lo que respecta a los materiales, los rellenos de alta eficacia, que ofrecen una gran resistencia y permiten limpiezas severas, y los separadores de gotas de alta eficiencia.
Además, una correcta accesibilidad es una de las mejores garantías de que la limpieza de la torre se podrá realizar correctamente. En este sentido, las torres actuales presentan una accesibilidad extrema a través de puertas amplias que permiten la entrada a las mismas de los equipos técnicos sin ningún problema. Igualmente, los sistemas para facilitar el drenaje, la limpieza y la toma de muestras han evolucionado en el mismo sentido.