Aunque todavía no se ha encontrado una cura para el Alzheimer -ni siquiera se conoce su origen y causas- hay numerosos trabajos en todo el mundo que persiguen este fin. La lucha contra el Alzheimer es constante y en los últimos meses ha dejado nuevos estudios que ayudarán a hacer frente a una de las enfermedades más comunes y temidas a la que se enfrentan las personas mayores. Desde ORPEA Ibérica han realizado un repaso a los 10 estudios, investigaciones, terapias y avances más importantes en relación a esta enfermedad degenerativa cerebral.
Uno de los principales descubrimientos realizados en los últimos doce meses vio la luz gracias al estudio liderado por Dena Dubal, de la Universidad de California. Los resultados de la investigación defienden que un fragmento de la hormona Klotho puede mejorar las funciones cerebrales durante toda la vida del paciente. Aunque aún son necesarios más estudios clínicos con los que determinar la eficacia de la hormona Klotho en los seres humanos.
Otro importante avance ha venido de la mano de un grupo de investigadores argentinos liderados por el doctor Tomás Falcone, investigador del CONICET. El estudio ayuda a comprender las fases iniciales de la enfermedad del alzhéimer, que estarían provocadas por los desbalances de las isoformas de la proteína Tau.
Un equipo español descubre una molécula que actúa como protector
En España, un equipo de investigadores liderado por José L. Marco-Contelles, Instituto de Química Orgánica General de Madrid, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), también ha aportado su granito de arena. Se trata de uno de los descubrimientos más relevantes de los últimos años, puesto que han hallado una molécula multipotente que actúa como un agente protector y es capaz de frenar los mecanismos que provocan el desarrollo de la enfermedad. La molécula descubierta, denominada MBA 354, podría posibilitar la producción de medicamentos eficaces en la cura, y no solo en los cuidados paliativos, del Alzheimer.
Por otro lado, un estudio del Consejo de Investigación Médica de la Universidad de Leicester (Reino Unido), dirigido por Andrew Tobin, ha probado en ratones un nuevo fármaco que mejora los síntomas de la degeneración cerebral y prolonga la vida.
El quinto avance se debe a investigadores del Centro Médico de la Universidad de Columbia, en Estados Unidos, han descubierto el genTMEM106B, que tiene relación directa con el envejecimiento del cerebro y que, a partir de los 65 años, influye en el riesgo de enfermedades neurodegenerativas.
Un estudio del Consejo de Investigación Médica de la Universidad de Leicester (Reino Unido) ha probado en ratones un nuevo fármaco que mejora los síntomas de la degeneración cerebral y prolonga la vida
Por otro lado, un equipo del Imperial College de Londres, liderado por la bióloga española Magdalena Sastre, logró a finales de 2016 frenar el desarrollo de la enfermedad en ratones, inyectando en su cerebro un virus portador del genPGC1-alpha. Los ratones tratados con el gen produjeron muchas menos placas amiloides que sus hermanos que no lo recibieron y tenían la misma memoria que los normales.
Una investigación llevada a cabo por investigadores del Hospital General de Massachusetts (Boston, EE.UU) y dirigida por Robert Moir, ha demostrado que la proteína beta-amiloide es un componente fundamental del sistema inmune y en la lucha frente a muchas infecciones. Moir aseguró a mediados de 2016 que “nuestros resultados sugieren la posibilidad, ciertamente intrigante, de que el Alzheimer aparezca cuando el cerebro percibe que está siendo atacado por patógenos invasores”.
El octavo de estos avances, también se llevó a cabo en nuestro país, el equipo de Carlos Dotti, investigador del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa, ha descubierto que el cerebro produce su propio colesterol, que resulta esencial para mantener las neuronas vivas y sanas. La presencia de esta molécula en el encéfalo tiende a perderse con la edad, y tanto personas mayores sanas como otras que sufren alzhéimer suelen presentar niveles de colesterol cerebral más bajos de lo normal.
Y finalmente, un equipo dirigido por Tony Wyss-Coray en la de la Universidad de Stanford (EE UU, busca remedios a la degeneración neurológica que a menudo desemboca en el alzhéimer. Han organizado el primer ensayo clínico para analizar los efectos de realizar transfusiones de plasma de personas de menos de 30 años en 18 personas mayores con alzhéimer.
Ensayos clínicos prueban la efectividad de nuevos fármacos
Además, a nivel europeo se están realizando numerosos ensayos clínicos que investigan fármacos para el tratamiento y prevención del alzhéimer. Alzheimer Europe ha lanzado el servicio ‘Clinical Trials Watch’, con información actualizada de ensayos en fase III y en España está en marcha el Registro Español de Estudios Clínicos, una base de datos pública, de uso libre y gratuito.
El proyecto EPAD, que integra a 35 instituciones académicas y laboratorios farmacéuticos de Europa, está reclutando a 6.000 personas que se someterán a ensayos clínicos para probar nuevos tratamientos. Este proyecto europeo de investigación con voluntarios asintomáticos o en estadios tempranos del Alzheimer quiere estudiar cómo evoluciona la enfermedad en sus etapas más tempranas.
El Grupo ORPEA, con 25 años de experiencia en el sector de personas mayores dependientes, cuenta actualmente con 44 residencias y 25 centros de día. En todos ellos emplean todas las técnicas y terapias que se han mostrado eficaces en el cuidado de las personas mayores que sufren Alzheimer. En estas residencias se utilizan diferentes técnicas asistenciales y de mejora cognitiva, así como unidades específicas para estos pacientes, como son las salas de reminiscencia, en las que se estimulan los recuerdos de los mayores; o las salas Snoezelen, que se ocupan de la estimulación sensorial.