Un artículo de Montserrat Sánchez González (Diplomada en Trabajo Social por la Universidad de Barcelona. Postgrado) y Mª del Pilar Aceituno Martín (Diplomada en Terapia Ocupacional en la Escola Universitària d’Infermeria i Teràpia Ocupacional de Terrassa UAB). Ambas desarrollan su trayectoria profesional en la Asociación de Familiares de Alzheimer de Barcelona.
El Alzheimer (EA), es una enfermedad neurodegenerativa progresiva, de origen desconocido y para la que actualmente no se puede ofrecer ningún tratamiento efectivo para paliarla. La demencia afecta a 1 de cada 20 personas mayores de 65 años y 1 de cada 5 a más de 80 años. A partir de 2017, se calcula que en todo el mundo hay 50 millones de personas con demencia y se espera que este número aumente a 131,5 millones en 2050 (Alzheimer’s Disease International). Como ya sabemos, la enfermedad de Alzheimer no sólo afecta a la persona que padece la enfermedad, sino que cambia la vida de toda la familia.
Una de las preocupaciones iniciales de las familias, cuando se diagnostica la enfermedad de Alzheimer a alguno de sus miembros, es la desorientación y que la persona no sea capaz de volver a su domicilio.
Frecuentemente y sin previo aviso, las personas que tienen Alzheimer pueden llegar a perderse en algún momento. Estar perdido provoca ansiedad y angustia en la persona y su familia, además de resultar peligroso. Es importante tener un plan de seguridad para poder acortar el tiempo de búsqueda de la persona extraviada. Lo complicado es intentar mantener el equilibrio entre la independencia y la seguridad.
Llegados a este punto nos hacemos la siguiente pregunta: ¿qué dispositivos existen para ayudar al cuidador al tiempo que aportan autonomía a las personas que padecen esta enfermedad?
Dando respuesta a esta pregunta podemos encontrar los denominados localizadores. Gracias al avance imparable de las redes GPS y las nuevas tecnologías, son uno de los productos más demandados por los familiares de personas con Alzheimer. Saber dónde está en cada momento, cómo ha llegado hasta allí…
Las nuevas tecnologías de localización mediante GPS (sistema global de posicionamiento) pueden ayudar a las familias a tener una mayor tranquilidad; saber que su familiar no se ha perdido, sino que se ha desorientado y es posible localizarlo. Este sistema requiere un conjunto de satélites alineados y de dispositivos coordinantes que facilitan la posición de la persona.
El uso de un sistema de localización GPS contribuye a la libertad individual y la seguridad de la persona diagnosticada, además de ofrecer tranquilidad a sus cuidadores.
Sin embargo, en el momento de decidir la utilización del localizador es necesario que las familias se planteen el valor que cada individuo da a su propia autonomía y el peligro que puede suponer la desorientación que esta enfermedad provoca.
La mayoría de familias que cuidan de una persona que sufre la enfermedad de Alzheimer normalmente toma sus decisiones teniendo en cuenta la historia de vida de la persona, valorando los beneficios que les ofrece a ambos el uso de esta tecnología.
El papel que juegan los profesionales en esta decisión es meramente de información y asesoramiento ya que realmente la decisión de utilizarlos está dentro del entorno familiar de la propia persona diagnosticada y dependiendo, de en qué fase de la enfermedad se encuentre, de ella misma.
En el mercado podemos encontrar varios dispositivos que proporcionan seguridad a familiares y cuidadores. Estos dispositivos se presentan en distintos formatos para adaptarse al día a día del usuario: pulsera, móvil, reloj…
A continuación, enumeraremos algunas de las prestaciones que pueden tener los localizadores:
· Atención permanente las 24 horas del día los 365 días del año desde el Centro de Coordinación (no todos los dispositivos disponen de este servicio)
· Información de la localización GPS o LBS de los dispositivos las 24 horas del día todos los días del año.
· Posibilidad de configuración personalizada y seguimiento de las zonas seguras, peligrosas o incremento de velocidad a más de 35 Km/h.
· Consulta a través de SMS o MMS por parte de los familiares para poder conocer la última localización de su familiar.
· Acceso a una web para los familiares vean la localización de su familiar.
· Botón de emergencia (no todos los dispositivos tienen esta prestación)
No hay que olvidar que hoy en día también disponemos de aplicaciones gratuitas con las que podemos localizar a amigos y/o familiares geográficamente a través de GPS, conexión 3G o redes Wi-Fi. Su funcionamiento es muy sencillo y nos permite conocer la ubicación de la persona.
La localización con estas aplicaciones puede ser aproximada, hay que tener en cuenta el modelo de terminal, la cobertura, si el usuario está en movimiento o no, si está en un espacio exterior o interior, ya que todos estos factores influirán en la información recibida. Para poder utilizar esta herramienta, es necesario que la persona lleve un móvil de última generación y que desde ese terminal se acepte la opción de estar localizado.
Qué aspectos debemos tener en cuenta a la hora de elegir alguna de estas opciones
· Perfil de usuario para el que está diseñado, la persona tiene que llevar un dispositivo al que se pueda adaptar con facilidad y que sea lo más cómodo posible para él.
· Entorno de la persona, rural o urbano. En las zonas rurales la cobertura, señal GPS o redes WI-FI, no tiene un nivel tan alto como en la ciudad, ya que el número de antenas y la oferta de operadores móviles suele estar limitada a uno o dos.
· Dispositivo: dimensiones, peso, resistencia, modelo, facilidad de uso, duración de batería, precio inicial y coste de mantenimiento, apoyo profesional detrás del terminal, servicio de mantenimiento.
Cada día aparecen nuevas herramientas o dispositivos para poder localizar a una persona. Por ello, si finalmente la familia toma la decisión de utilizar alguna de ellas, es importante tener toda la información para elegir la opción que mejor se adapta a las necesidades de la familia y de la persona que la va a utilizar.
Tenemos que ser conscientes que son herramientas que tiene beneficios e inconvenientes, que podremos utilizar durante un tiempo determinado y en unas fases concretas de la enfermedad. Igualmente, no podemos olvidar que usar un aparato localizador no disminuye la necesidad de supervisar frecuentemente a la persona que padece Alzheimer y otros trastornos relacionados.
1 Comment
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Todo lo que sea tecnología aplicada a las personas creo que es el máximo avance y más en estos casos, también este tipo de localizadores se pueden emplear en diferentes ámbitos y a todas las edades, como leí en un artículo hace unos días https://gpspara.com/localizador-gps-de-personas-mayores-adultos-ninos/ , sin duda es una buena noticia y que además sea extensible a todo tipo de usuarios con un precio ajustado. Saludos!