La empresa Seland ha diseñado un traje de neopreno que permite a personas con discapacidad disfrutar más y mejor del medio acuático, ya que incorpora un sistema de apertura completa para su fácil colocación, un tejido termal extend interior que aumenta la protección frente al frío y sistemas de flotación por lo que no necesita tantos cuidados externos.
Así, este traje de neopreno responde a las necesidades específicas de estos usuarios con movilidad reducida a la hora de la inmersión en el agua; ya que es fácil de poner y ofrece una conservación óptima del calor corporal.
La idea surge ante la demanda de pedidos especiales de personas con algún tipo de lesión como parálisis en las piernas, uso de muletas, prótesis… que llegan a esta empresa vasca especializada en el diseño y fabricación de trajes de neopreno, que suponían tener que adaptar los neoprenos para cada caso. Por lo que la empresa ha optado por diseñar un producto para personas con movilidad reducida.
“Muchas personas con discapacidad utilizan el agua como espacio para la rehabilitación, ya que es una buena terapia, para muchos es una liberación. Había que hacer un traje acorde a sus problemas, principalmente ponerse el traje y el frío”, señala Cristina Solaun, diseñadora de Seland.
Se abre totalmente, se pone con velcros y retiene el calor corporal
El detalle más revolucionario de este traje de neopreno es la forma de ponérselo, “a una persona con discapacitad le resulta imposible ponerle un traje de neopreno”, afirma Cristina Solaun. Ahora, con este sistema el traje se abre entero y se ajusta con velcros por los laterales, de modo que la persona permanece tumbada sobre el traje y se va cerrando por zonas.
El traje incorpora también un collar de espuma y neopreno que sujeta la cabeza según las necesidades, “hay personas con parálisis cerebral que hacen fuerza hacia un lado, por ejemplo”. La espuma o foam se puede cambiar de lugar y se adapta a cada caso permitiendo regular la sujeción.
“Una persona que está quieta en el agua no genera ningún calor y solo aguanta unos minutos dentro, con este traje especial se puede llegar a estar una hora dentro del agua”
El traje permite también incluir flotaciones para equilibrar distintas zonas del cuerpo o pesos, si lo que se requiere es conseguir que se sumerja. De este modo se puede adecuar a las necesidades concretas de la persona que lo va a utilizar, manteniéndose equilibrada en el agua sin ayuda de cuidadores, para que el rehabilitador pueda trabajar con ella.
Además, el diseño de este traje permite mantener mucho más tiempo el calor corporal, gracias a un tejido termal extend interior que aumenta la protección frente al frío. “Una persona que está quieta en el agua no genera ningún calor, tiene mucho más frío y solo aguanta unos minutos dentro, pero con este traje especial se puede llegar a estar una hora sin frío dentro del agua”, destaca la diseñadora de Seland.
Después de dos años inmersos en el proyecto, Seland ha diseñado varios prototipos y está trabajando con una persona con parálisis cerebral que se comunica a través de la mirada con un tablero, donde expresa sus sensaciones sobre el producto. A partir de sus apreciaciones el equipo ha perfilado todos los elementos del traje de neopreno para que el resultado sea el óptimo. El diseño está patentado, en etapa de producción, y en breve comenzará a comercializarse.