La prevención es un factor clave para evitar el cáncer de colon y estar alerta a posibles señales que pueden indicar que es necesario consultar con el especialista. El pasado año se registraron 44.332 nuevos casos de cáncer de colon entre hombres y mujeres de España, de acuerdo con los datos facilitados por la Alianza para la Prevención del Cáncer de Colon, que aglutina a distintas asociaciones de pacientes, como la Asociación Española Contra el Cáncer, y sociedades científicas, como la Sociedad Española de Oncología Médica.
A nivel mundial, el cáncer con mayor incidencia es el de pulmón, pero en el ámbito nacional el cáncer de colon sigue siendo el tipo de tumor más frecuente, tal y como advierten desde Sanitas. “Se trata de un tipo de cáncer que sólo da la cara cuando ya es tarde. Los síntomas pueden ser visibles cuando la enfermedad está muy avanzada, por lo que la prevención es un factor clave”, explica el Dr. Ramón Abad, responsable del servicio de endoscopias del Hospital Sanitas CIMA.
En la misma línea, la Dra. Margarita Feyjóo, jefa del Servicio de Oncología del Hospital Universitario Sanitas La Moraleja, advierte que “la mayoría de los casos de cáncer de colon comienzan con la aparición de un pólipo que, con el tiempo, puede llegar a convertirse en un cáncer de colon. El problema es que los pólipos suelen ser pequeños y no presentan síntomas. Por eso es importante realizar colonoscopias preventivas”.
Y el Dr. Pedro Salinas, jefe del Servicio de Oncología del Hospital Universitario Sanitas La Zarzuela, recalca que “aunque muchas personas no presentan síntoma alguno durante las primeras etapas de la enfermedad, sí pueden aparecer síntomas directamente relacionados con el tamaño y la ubicación del cáncer en el intestino grueso”.
Por todo ello, estos especialistas recomiendan tener una especial atención a estas señales que indican que se debe consultar al especialista:
- Un cambio en los hábitos intestinales, como puede ser la diarrea o el estreñimiento, así como en la consistencia de las heces, durante más de cuatro semanas.
- La presencia de sangre rectal o sangre en las heces. Puede ser de un color rojo vivo o de una tonalidad más oscura. En cualquier caso, esto significa que debe consultar a un especialista cuanto antes.
- Dolor abdominal continuo, como calambres, gases o dolor.
- Una sensación de necesitar volver a defecar justo después de una deposición, como si no se hubiera conseguido vaciar por completo los intestinos.
- Cansancio o fatiga continuada.
- Pérdida de peso acusada sin una causa aparente.
Más allá de estos síntomas, el mejor modo para detectar pólipos es la colonoscopia. Y en caso de detectar pólipos, la mejor opción es eliminarlos. “No sabemos qué pólipo se transformará en un cáncer y cuál no. El 90% de ellos llevan carga de malignidad, pero sólo un 20% se transforman en un cáncer. En cualquier caso, nuestra recomendación es extirpar todos los pólipos a través de una endoscopia, de modo que con una simple resección podemos evitar un 15% de todos los casos de cáncer de colon”, subraya el Dr. Abad.
En cuanto al perfil de pacientes, el cáncer de colon afecta por igual tanto a mujeres como a hombres, aunque las personas que ya hayan tenido pólipos o que tengan antecedentes familiares de cáncer de colon y que tengan más de 50 años deberían someterse a exámenes preventivos regulares para prevenir la aparición del cáncer de colon.
Para más información sobre el cáncer de colon: www.alianzaprevencioncolon.es