La exposición “A vivir que son 100 años”, organizada por la Fundación General CSIC en Sevilla, ofrece una visión científica de la longevidad y el envejecimiento saludable a través de un recorrido por los aspectos que forman parte de nuestro envejecimiento como individuos y como sociedad.
La prolongación de las trayectorias de vida individuales y el proceso de envejecimiento consecuente -individual y social-, ofrecen algunos de los más apasionantes retos a los que se enfrenta la investigación científica en la actualidad, destacn desde la Fundación General CSIC. Y este cambio demográfico ha provocado un gran interés por las personas más longevas, y también por los factores que intervienen en sus largas vidas.
De hecho, los mayores de hoy son la primera generación que de manera masiva está alcanzando una longevidad impensada… Este fenómeno es un gran logro de un proceso históricamente reciente. En la España de 1.900, la esperanza de vida de un recién nacido era de casi 35 años. Un siglo después, hay que esperar a cumplir 50 años, para tener por delante la misma expectativa de vida de un recién nacido de entonces.
Estructurada en cinco ámbitos, la exposición “A vivir que son 100 años” da respuestas a algunas de las preguntas que nos hacemos durante este recorrido vital:
- ¿Qué es el envejecimiento?
- ¿Qué hace la gente para tener vidas tan largas?
- ¿Cómo condiciona el entorno a nuestra forma de envejecer?
- ¿Qué debo hacer para conseguir un envejecimiento saludable?
- Y un paso más ¿qué hacer para alcanzar los 100 años saludablemente?
Durante la inaguración de esta exposición, que puede visitarse hasta a marzo de 2019 en el museo Casa de la Ciencia de Sevilla, Margarita Paneque Sosa, delegada Institucional del CSIC en Andalucía y Extremadura, destacó que esta exposición es un claro ejemplo de cómo se debe atender una de las Misiones del CSIC: transmitir a la ciudadanía, de forma clara y asequible, el conocimiento generado en la investigación que se lleva a cabo en sus centros, y la relevancia en la vida cotidiana. “En este caso concreto, que se estudian la longevidad y el bienestar, la repercusión en la vida de todos es evidente, y por tanto esta muestra es una excelente oportunidad para captar el interés del público en la investigación que se hace en los centros del CSIC”.
Por su parte, Álvaro Giménez, director general de la Fundación General CSIC, puso el acento en que el envejecimiento y la longevidad es un debate que despierta muchos sueños, muchas ilusiones y muchos miedos… Por ello ha dado pie a muchos mensajes y debates no siempre fundamentados en el conocimiento científico riguroso. “Esta exposición pretende contribuir a que una sociedad, como la nuestra, en proceso de envejecimiento se conozca mejor a sí misma, basándose en las últimas evidencias científicas”, afirmó.
El doctor Alexandre Kalache, médico y gerontólogo, presidente de la Alianza Global de Centros Internacionales de Longevidad (International Longevity Centre Global Allicance) fue el encargado de pronunciar la conferencia inaugural “La revolución de la longevidad”. En la misma hizo hincapié en que estamos viviendo una revolución a nivel global en la que estamos inmersos y cree que nos encontramos “en un momento clave: en la Revolución de la longevidad”, ya que actualmente hay en el planeta más personas vivas mayores de 60 años que la suma de todas las que ha habido a lo largo de la Historia de la Humanidad. “Una transición imparable, que va de la edad adulta a la vejez”; algo que él denomina “gerontolescencia”.
Para este especialistas «la vida ha dejado de ser una carrera de 100 metros, para convertirse en una maratón para el que hay que prepararse, tanto individualmente como a nivel social”, por lo que recomienda «añadir vida a los años«. Y ante la necesidad de proporcionar recursos suficientes a la población de mayor edad, Alexandre Kalache propone profesionalizar a quienes atienden a las personas necesitadas de cuidados.