Tal y como se indica desde esta Asociación, con este premio «los votantes han querido reconocer su firme oposición al incremento del Salario Mínimo Interprofesional, alegando su especial impacto en la probabilidad de perder el empleo en determinados colectivos. Junto a quienes auguran que cobrar 900 € al mes, pone en peligro la economía y es germen de una futura crisis, aunque jamás han dicho nada sobre las escandalosas subidas salariales de quienes disfrutan de escandalosos emolumentos, como ellos mismos».
Tras Pablo Hernández Cos, en un segundo lugar, con un 30,1% de los votos, ha quedado la Fiscalía de Barcelona, por solicitar 4 años y 10 meses de cárcel por robar un bocadillo, acusando al autor de “obtener un beneficio patrimonial ilícito”. «Algo que sonaría a broma, de no ser porque ese hombre llevaba 3 días sin comer», indican desde la Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales.
En tercer lugar, con una cuarta parte de los votos (25,1%), lo ocupa la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo, por calificar de “abandono de la responsabilidad moral” a quienes contratan “terceras personas” para atender a sus familiares en situación de dependencia, (sentencia 459/2018).
El Premio Corazón de Piedra fue instaurado por la Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales para reconocer a las personas que muestren mayor insensibilidad y cuyas opiniones o actuaciones produzcan más desamparo y sufrimiento a las personas y familias, especialmente en situaciones de vulnerabilidad. Esta es la sexta ocasión en la que se entrega, anteriormente recayó en Ana Mato, María Dolores de Cospedal, Mariano Rajoy, en los 36 ayuntamientos mayores de 20.000 habitantes “pobres en inversión social” y el pasado año en Dolors Monserrat.