/p>Desde la Asociación de Centros Geriátricos del Principado de Asturias (ASCEGE) se aboga por la creación de un Ministerio de Mayores, “que debe elevar del 0,5% del PIB actual al 2% de inversión en mayores”, y que contribuya a mejorar la dignidad y la calidad de vida. Una inversión que “no sólo va dirigida a los mayores, sino a todos los trabajadores, que ahora mismo se sienten desatendidos”.
Así se expresó Arsenio Alonso-Collada Sánchez, presidente de ASCEGE durate la presentación del informe ‘El caos de la dependencia, soluciones y visión de futuro en el Principado de Asturias’ del Círculo Empresarial de Atención a las Personas (CEAPs).
En su intervención, Arsenio Alonso-Collada también criticó “la falta de poder de las personas a la hora de elegir residencia, la desigualdad entre las comunidades autónomas y la falta de criterios en la financiación. Estamos en una situación de caos, en el sentido literal de la palabra”.
geriatricarea Ministerio de Mayores
Aitor Pérez Artetxe y Arsenio Alonso-Collada durante la presentación de este informe

 
El responsable de ASCEGE reflexionó sobre el envejecimiento de la población asturiana y la función que desarrolla la asociación que él preside, afirmando que desde la misma “se lleva a cabo una labor de calidad que dé respuesta a todos los problemas de los colectivos de mayores. Nuestra asociación es pequeña, pero representa mucho del trabajo que se está haciendo sobre dependencia en Asturias. Nuestros objetivos principales están en poner a las personas en el centro de atención, rebajar el IVA al 4% para la gente dependiente, dotar de recursos a las prestaciones y aumentar la colaboración pública y privada”.

Por su parte, Aitor Pérez Artetxe, autor del estudio y socio director de Gerokon Gerentology Consulting, destacó la necesidad de avanzar hacia un sistema mixto, por lo que proponemos la implantación de un sistema de concertación, con el objetivo de ofrecer una oferta más amplia a la ciudadanía, con un precio único en función de cada grado de dependencia. La idea sería un modelo de atención unificada.
Este experto también hizo referencia a “la falta de criterio en la inspección y en la evolución de la dependencia, junto con la necesidad de un historial sociosanitario compartido por todos los sectores profesionales implicados. De ese modo, se facilitaría mucho el trabajo a la hora de aportar soluciones”.
Unas 150.000 personas cuidan a personas mayores y no en todos los casos se acredita su profesionalidad. “Con una línea de coordinación más eficaz, se mejoraría el empleo, acabando con la picaresca que se produce en algunos casos, por lo que tanto el Estado como las personas trabajadoras se beneficiarían de unos controles más eficaces en el trabajo de dependencia, además de un cambio en las relaciones públicas y privadas para llegar a un consenso en el estado de bienestar”, señaló Aitor Pérez.
Asimismo, el presidente de ASCEGE se mostró crítico con la decisión de destinar 300 millones al pago de la cuota de la Seguridad Social de los cuidadores familiares. “No estamos en contra de las familias, pero esta prestación, la del cuidador familiar, es la estrella. Con esos 300 millones no se ha dado ningún servicio nuevo a los usuarios ni se ha sacado a nadie del limbo (denominación que reciben las personas que tiene derecho a una ayuda a la dependencia , pero no la reciben)”.
Alonso-Collada destacó también que «el Estado debe cumplir y aportar el 50% del coste de la dependencia, no como ahora. De los 195 millones que costó la dependencia en Asturias el año pasado, el Estado solo aportó 28”.
Por último, Aitor Pérez Artetxe advirtió que “unos años habrá un porcentaje muy elevado de población mayor, que tendrá que sostener una escasa población joven, con lo que hay que invertir estos gráficos, intensificando las políticas del fomento de la natalidad. El fomento de las ‘Ciudades amigables’ y la mejor atención a las condiciones laborales de los profesionales, uno de los pilares del servicio de la dependencia son, igualmente, otros aspectos a resaltar.