Consciente de que la prevención es fundamental, desde la franquicia de centros de día para mayores Vitalia recomienda una serie de hábitos saludables a tener presentes ante la llegada de las altas temperaturas:
Hidratación
- Asegurarse de tomar muchos líquidos durante todo el día, incluso aunque no se sienta sed (cuantos más año cumplimos mayor es la tendencia a no notar o no expresar esta necesidad)
- Beber dos vasos de agua llenos nada más despertar y otro antes de acostarte, y al menos otros 8 a lo largo del día
- Se pueden tomar bebidas refrescantes (sin cafeína, alcohol, gas ni mucho azúcar), pero lo más naturales posible evitando, por ejemplo, los zumos industriales
- Si se decide tomar bebidas para deportistas (como Aquarius), hacerlo con moderación y siempre que no exista contraindicación médica
- Las sopas y caldos, alimentos no sólidos como el gazpacho, y frutas con alto contenido en agua (como la sandía) también cuentan cómo proporcionan hidratación
Alimentos saludables
- Tomar comidas ligeras que incluyan la mayor cantidad posible de frutas y verduras
- Abstente de la comida procesada
- Los vegetales incluyen minerales y agua en abundancia, que también ayudan a la hidratación
Medir el grado de hidratación
- Signos como una piel apagada y escamosa, debilidad, confusión, sequedad de la boca y ojos hundidos, pueden indicar deshidratación
- Una buena manera de saber si la persona mayor está bien hidratado es fijándote en la frecuencia con la que orinas y el color de la misma: se debería acudir al baño tantas veces como en invierno, y la orina debería tener un color amarillo muy clarito o casi transparente; si su tono es intenso o desprende fuerte olor, podría ser un signo de deshidratación
Vigilar la sudoración
- Lo ideal es sudar lo mínimo posible; si por alguna razón se suda más de lo normal, asegurarse de reponer líquidos
- Para disminuir el sudor, en general, la mejor medida es evitar las altas temperaturas y el pasar calor: lleva ropa ligera; mantener en las estancias una temperatura fresca usando ventiladores, aire acondicionado o abriendo ventanas en momentos de poco sol para que fluya el aire (cerrar ventanas y persianas cuando haya mucho sol)
- Tratar de que la temperatura interior sea constante y no demasiado fría
- No dormir excesivamente tapado
- Si se sale al exterior, elegir preferiblemente horas de poco sol (primeras horas de la mañana y últimas de la tarde), y no pases mucho tiempo fuera
- Si realizas ejercicio físico, que sea moderado y, si puede ser, en el interior y con constante hidratación
Cuidado con los golpes de calor
- Estar expuesto a un elevado calor durante un tiempo prolongado puede derivar en el conocido golpe de calor, que puede poner en riesgo tu salud (algunos síntomas son: letargo, mareos, confusión, debilidad, dolor de cabeza y desmayos, entre otros)
- Para evitarlos, la temperatura interior debería estar entre los 18 y los 24 grados, y lo mejor es permanecer en casa o en un espacio interior a temperatura fresca durante las horas en las que el sol cae con mayor intensidad
- Limitar la exposición al sol, y si se camina bajo el mismo cubrirse la cabeza con una gorra o sombrero, o utiliza un paraguas de verano
- No salir a la calle sin compañía
- Si se toma un baño, tratar de no pasar excesivo calor
- Vigila también la actividad física: que no sea extenuante ni se realice bajo el sol
Visitar al médico
- Pedir cita con el médico de cabecera, o consultar con Enfermería, para que te puedan ofrecer pauta más especificas y adaptadas al estado particular de salud y a edad de cada persona
- Si se tiene cualquier duda sobre este tema, o si se nota algún problema que tenga que ver con el calor, comunicarlo y consultar inmediatamente con los profesional de la salud
Imponer la “Ley Seca”
- Evita a toda costa el consumo de bebidas alcohólicas (se puede tomar una cerveza fría al día o un vaso de sangría o vino, siempre y cuando se cuide la hidratación)
- El alcohol es un potente deshidratador y puede dar al traste con las medidas contra la misma
- Además, cuando se consume alcohol se tiende a ingerir menos líquidos que proporcionan verdadera hidratación
Los tiempos cambian y el clima también
- Cada año las estaciones se vuelven más impredecibles y cambiantes; es más difícil saber cuándo va a llegar el calor o si, una vez llegado, permanecerá
- No hacer cambios completos de armario (dejar algo de ropa de invierno y entretiempo con la de verano en el armario), y no fiarse de, si ha refrescado unos cuantos días, salir de nuevo a la calle abrigado porque ese día puede hacer de repente un calor excesivo
- Consulta diariamente el parte meteorológico y tener a mano un termómetro de interior y otro de exterior para conocer la temperatura
- Las personas que viven solas pueden mirar por la ventana para consultar qué día hace y fijarse en cómo va la gente vestida; también pueden preguntar a un familiar, vecino o persona conocida