Bajo el título «Vínculos Comunitarios y Soledades Urbanas», la Obra Social «la Caixa» y el Grupo Tangente ponen en marcha un pionero ciclo de conferencias y talleres sobre las soledades no deseadas en las ciudades, en el que también colaboran Madrid Salud y las cooperativas Harrman e Indaga.
El itinerario, que arrancará el próximo 31 de octubre y finalizará el 17 de abril de 2020, tiene como objetivo pensar estrategias basadas en los cuidados y la corresponsabilidad vecinal ante las soledades urbanas, así como la realización de un mapa de experiencias e iniciativas ciudadanas que favorezca el trabajo en red.
A través de este ciclo de conferencias y talleres que se impartirán en CaixaForum Madrid se quiere promover un itinerario para el encuentro y la reflexión a nivel estatal que facilite la reflexión sobre cómo abordar, desde un enfoque comunitario, las soledades urbanas. Por otro lado, se pretende visibilizar los determinantes sociales que están detrás de la soledad (individualismo, capacitismo, productivismo, machismo, racismo…) para promover un modelo de organización social y política que respete la diversidad y los derechos humanos.
Y es que, tal y como destacan desde la organización de esta iniciativa desgraciadamente la soledad no deseada afecta, cada vez más, a diferentes tipos de personas y no solo a los más mayores. «Se trata de un problema real que puede padecer cualquier grupo social en diferentes momentos de la vida, ya que son múltiples los factores o causas culturales, sociales, económicas y espaciales que están detrás de las soledades urbanas», afirman.
La soledad es un fenómeno complejo que no solo tiene que ver con la edad. La inmediatez de las comunicaciones, el modelo urbanístico predominante, la omnipresencia de una norma cultural, la desigualdad por razones económicas, culturales, de género u orientación sexual, así como la discapacidad también provocan diferentes soledades urbanas. Y es que, pese a los diferentes intentos de promover sociedades más democráticas, el modelo de organización social presenta múltiples barreras y malestares que aíslan y discriminan a las personas y que solo suelen tener respuesta desde un punto de vista médico e individual, aunque el problema sea social y relacional.
Movilización comunitaria y redes de apoyo contra la soledad no deseada
Se trata de un problema de enormes dimensiones, ya que solo en la ciudad de Madrid, más de 240.000 personas sufren soledad no deseada, una cifra que crece progresivamente con un importante coste para las personas y su entorno. Por ello, es necesario pensar estrategias basadas en los cuidados y la corresponsabilidad ante los malestares de la vida cotidiana. En este sentido, están tomando protagonismo las estrategias preventivas y de intervención que optan por recurrir a la movilización comunitaria y a la formación de redes de apoyo social para abordar la experiencia de soledad, y que superan los límites de los modelos de atención asistenciales.
«Vínculos Comunitarios y Soledades Urbanas» forma parte del compromiso del Grupo Tangente para mejorar el entorno en el que se ubica, tal y como señala uno de los principios de la Red de Economía Social y Solidaria. «Por ello, y porque en nuestras metodologías de trabajo hay un alto componente en creatividad e innovación social para hacer frente a los retos ecosociales, seguimos apostado por trabajar para mitigar la soledad no deseada desde un enfoque comunitario», afirman desde esta entidad.
Este proyecto se suma al resto de iniciativas que Grupo Tangente tiene en marcha en torno a la soledad no deseada, como es la coordinación del proyecto piloto Prevención de la Soledad No Deseada, de Madrid Ciudad de los Cuidados de Madrid Salud; el proyecto Cotidianas, sobre soledad y mujeres mayores, que está en fase de lanzamiento y en el que también colabora la Obra Social «la Caixa»; y diferentes procesos de facilitación para la creación de grupos de vivienda olaborativa/cohousing, como Cohabita Rivas.