Con el objetivo de sensibilizar a la sociedad sobre la poca atención que se le presta al problema tan grave que representa la soledad no deseada en la que viven muchas personas mayores, Bilbao Bizkaia Kutxa (BBK) ha puesto en marcha el proyecto ‘Invisible Soledad’.

En el marco de esta iniciativa, la entidad financiera ha colocado una escultura hiperrealista que lleva por nombre ‘La última persona fallecida en soledad en el Paseo del Arenal de Bilbao hecha a imagen y semejanza de Mercedes, una mujer de casi 89 años, afectada por esta problemática, para poner el foco no solo en el fallecimiento en soledad de los mayores, sino también en el abandono social que en muchas ocasiones le precede.

Mercedes, la protagonista de la campaña, hace tiempo que vive en una situación de soledad no deseada y, por lo general, su único contacto social semanal es la atención que recibe de una voluntaria de Cáritas y la visita ocasional de algún sobrino. Ella representa a todas aquellas personas en situación de soledad no deseada, que han tenido una vida activa pero la vejez ha dificultado su autosuficiencia para salir a la calle.

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La escultura hiperrealista de Mercedes, que lleva por nombre ‘La última persona fallecida en soledad’, ha impactado a muchos transeúntes

“La soledad es lo más terrible que hay, algo que nunca te imaginas. Son tantas horas de estar encerrada en casa, que la soledad te come”, afirmó Mercedes durante la presentación de Invisible Soledad. “Antes tenía mi vida, pero ahora no tengo nada; no tengo vida. Se te van muriendo los amigos, se te va muriendo la familia y eso es terrible. Es como si estuvieras muerta en vida”, señaló.

Rubén Orozco, reconocido escultor hiperrealista originario de Guadalajara (México) ha sido el autor escogido para la creación de la escultura. La obra es una réplica a tamaño real de Mercedes y representa, a través de su gesto y del reloj que lleva entre sus manos, el “inevitable paso del tiempo”, afirma el artista, resaltando que “no quiero imaginarme una vida sin poder hablar, tocar o ver a otra persona durante mucho tiempo. Por eso hago esta obra, para combatir un miedo personal”.

Orozco ha trabajado durante más de tres meses en replicar cada detalle de Mercedes. Expresa su creatividad a través de materiales como la resina, la silicona, la madera e incluso pelo humano. “Para hacer una escultura de una persona es necesario verle el alma. El arte hiperrealista es el arte más cercano a la conexión con una persona. Es poder ver, sentir y casi conectar con ella, aunque sea una escultura”, explica.

Soledad no deseada, una creciente realidad

Mercedes representa a una de las más de 106.000 personas mayores de 65 años que sufren las consecuencias de esta realidad en Euskadi, de las cuales 60.000 residen en Bizkaia. Según datos publicados en 2018 por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en los últimos 6 años el número de hogares unipersonales conformados por personas mayores de 65 años ha crecido casi un 9,30%, siendo el dato actual el más alto registrado. En cuanto a la distribución por sexos, el INE señala que casi un 75,5 % del total son mujeres; 79.500 frente a 27.100 varones.

Este dato confirma la tendencia al alza que se registra en el conjunto de España, donde en el mismo periodo la cifra ha aumentado cerca de un 11,4%; y también a nivel global, donde el 16,6% de las personas mayores de 60 años viven solas, según la ONU. En la Unión Europea esta cifra aumenta, afectando al 31,1% de europeos de tercera edad. Según un estudio elaborado en 2018 por el Institute for Health Metrics and Evaluation (IHME) de Washington, de mantenerse la tendencia actual, España será el país más envejecido del mundo para 2050, superando incluso a Japón.

En este contexto, tal y como indica, Xabier Sagredo Ormaza, presidente de BBK, con Invisible Soledad, desde “BBK se quiere afrontar una realidad olvidada”, atreviéndose a “hablar de frente sobre el problema de la soledad y aportar soluciones concretas que permitan generar un cambio positivo sobre esta realidad que nos afecta a todos”.

Por su parte, Nora Sarasola, directora de la Obra Social BBK, destaca que la entidad pondrá en marcha varias iniciativas, como la creación de una red para la detección de personas aisladas, un observatorio de personas mayores de 80 años, la implantación de servicios de atención personalizada y de acompañamiento e incluso una escuela para la prevención de la soledad.

Entre ellas, destaca el proyecto BBK BEHARI, desarrollado junto a la asociación Agintzari, que se basa en el desarrollo de un sistema tecnológico que, gracias a la tecnología GIS y elementos de big-data, ofrecerá una base de datos geográfica de personas mayores que estará al servicio de los Servicios Sociales Municipales. Por otro lado, el proyecto ERRO ETA ADAR, en colaboración con la Fundación Etorkintza, pretende crear nuevos lazos intergeneracionales entre la población adulta-mayor y la población joven de l barrio de Zorroza, fomentando su sentimiento de utilidad y autonomía, potenciando hábitos saludables e intercambiando conocimiento mutuo entre ambas generaciones para desterrar así los estereotipos de edad”, explica Sarasola.