La tercera planta del hospital de Eibar acogerá este año dos Unidades Residenciales Sociosanitarias, que atenderán y prestarán asistencia a personas, que por distintas circunstancias, necesitan cuidados sanitarios y sociales simultáneamente.

Con una superficie de 2.500 metros cuadrados, contarán entre las dos con cerca de 50 plazas destinadas a recursos asistenciales de carácter temporal, especialmente destinadas a personas que su situación socio-familiar no les permite asegurar una adecuada aplicación y supervisión en su domicilio ni en una residencia de personas mayores. Al estar en un término medio, en estas unidades residenciales sociosanitarias se les proporcionará las prestaciones necesarias de manera temporal hasta que su situación mejore.

En este sentido, sus objetivos son promover la mejora de las capacidades funcionales y proporcionar atención a pacientes ingresados que pese a encontrarse en situación de alta clínica, la misma no puede llevarse a cabo por motivos sociosanitarios de diversa índole.

Las unidades residenciales sociosanitarias, como las que va a acoger el hospital de Eibar se caracterizan por:

• Ser equipamientos donde se atiende de forma temporal transitoria a personas que presentan, durante un tiempo limitado, necesidades de atención simultáneas sanitarias y sociales.
• Ser recursos intermedios entre unidades hospitalarias y centros de la cartera de servicios sociales (gerontológicos, de discapacidad, de salud mental,), dotados de equipamientos específicos, tanto de recursos materiales como humanos, superiores a los centros de la cartera de servicios sociales.
• Ofrecer prestaciones que respondan a las necesidades sanitarias y sociales de las personas a atender, mediante una atención de carácter integral y una organización de servicios relacionados con el diagnóstico médico y social. Por tanto, dicha atención corresponde a un nivel asistencial intermedio entre un recurso sanitario y un recurso social.
• Ser equipamientos específicos donde acogen, de forma temporal, a personas con el objeto de mejorar o mantener su nivel de autonomía personal, adquirir ganancia funcional, recibir cuidados de enfermería, apoyar y promover su salud, y orientar y gestionar apoyos sociales para el domicilio o el traslado a un equipamiento social.

La puesta en marcha de estas unidades es fruto del acuerdo entre el Departamento de Salud del Gobierno Vasco y la Diputación Foral de Gipuzkoa. Tal y como indica la consejera de Salud, Nekane Murga, con este acuerdo “ascendemos un peldaño más en la estrategia conjunta de todas las instituciones vascas para mejorar la atención sociosanitaria que prestamos”.

Para ello y con este compromiso, la consejera asegura que el Gobierno Vasco, seguirá implementando las actuaciones necesarias para ofrecer a la población un modelo de desarrollo y progreso en el que la salud forme parte de todas las políticas y contribuya en la construcción de una sociedad más igualitaria y solidaria, atendiendo al envejecimiento poblacional, la cronicidad y la dependencia y la emergencia de las necesidades sociosanitarias que le acompañan.

Por su parte, el Diputado General de Gipuzkoa, Markel Olano, afirma que las nuevas instalaciones suponen “extender” este servicio sociosanitario a las comarcas de Debabarrena y Debagoiena, de ahí su “relevancia desde el punto de vista del equilibrio territorial”. Actualmente Gipuzkoa cuenta con 100 plazas de este tipo repartidas entre Donostia (73, en el Hospital de Cruz Roja en Donostia) y Zumarraga (27, en la residencia Argixao), a las que se sumarán este año las dos unidades de Eibar. “Gipuzkoa está apostando decididamente por la modernización de sus servicios sociales en todo el territorio, afrontando las necesidades de la sociedad actual y preparándonos para el futuro, garantizando así el bienestar y una atención digna para todas las personas”, afirma el Diputado General de Gipuzkoa.