La tasa de incidencia de la gripe en España sigue aumentando, y ya se sitúa en 255,6 casos por 100.000 habitantes y continúa todavía en fase de ascenso pero con tendencia a estabilizarse, tal y como se indica desde el Sistema de Vigilancia de Gripe del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII). Las personas mayores con problemas cardiovasculares, respiratorios y neurodenegenerativos, como las demencias, son las que más precauciones deben tomar para protegerse el virus.

La población joven y de mediana edad que goza de buena salud puede experimentar una mejoría en dos o tres días de los molestos síntomas de la gripe (dolor muscular, irritación de garganta, estornudos, fiebre, malestar general…), pero la enfermedad puede complicarse cuando el afectado es una persona mayor.

La bajas temperaturas generan un clima perfecto para el incremento de los virus, entre ellos, el de la influenza, conocido comúnmente como virus de la gripe. Un virus que, si no se previene, se propaga a una velocidad asombrosa. En las grandes poblaciones, el índice de contagio de la gripe oscila entre el 5% y el 15%, pero cuando hablamos de colectivos en constante contacto y localizados en lugares cerrados, como las residencias de la tercera edad, estas cifras se disparan hasta llegar al 50%. «Por este motivo, debemos extremar las precauciones en esta época del año y la mejor manera de hacerlo es a través de la vacunación», afirma David Curto, responsable de Gestión Asistencial de Sanitas Mayores.

Este especialista señala que “el funcionamiento de la vacuna se basa en generar anticuerpos de protección contra el virus. Cada año, las autoridades sanitarias determinan, a raíz de las investigaciones, qué virus son los más fáciles de propagar en esa temporada y los incluyen en la vacuna antigripal. La vacunación puede realizarse durante todo el invierno, ya que la temporada de gripe va desde el mes de octubre hasta mayo”.

La Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG) insiste en que la vacunación es una de las medidas más seguras y efectivas contra estos virus, ya que reduce en más de un 30% la hospitalización de los mayores y en un 40% la mortalidad por todas las causas. Además, recomienda la vacunación de aquellos que estén en contacto directo con las personas mayores, tanto para evitar el contagio de estos últimos como el suyo propio.

Otros consejos que ayudarán a evitar la gripe son:

• Lavarse las manos muy a menudo
• Evitar compartir vasos, cubiertos, toallas y otros utensilios que estén en contacto con la saliva u otras secreciones de personas con gripe
• Taparse la boca y la nariz al estornudar o toser con un pañuelo desechable o con el brazo
• Llevar una vida sana, con una buena calidad de sueño, una alimentación saludable y mucha hidratación -con agua, principalmente-, así como estar físicamente activo.

Tal y como indican desde el Instituto de Salud Carlos III, desde el inicio de la temporada de gripe este año, se han notificado 4 brotes de gripe en tres CCAA. En todos ellos se identificó el virus tipo A no subtipado. Dos de ellos se produjeron en instituciones sanitarias, y otros dos en geriátricos. La media de edad de los pacientes afectados es de 58 años en las instituciones sanitarias, y de 88 en el geriátrico.

La tasa de hospitalización de pacientes con gripe confirmada es de 15,3 casos/100.000 habitantes, registrándose la mayor proporción de casos en los grupo de más de 64 años (40%), seguida del grupo de 15 a 64 años (36%). La de casos graves es de 5,5 por 100.000 habitantes: 59% son hombres y la mayor proporción de casos se registra en el grupo de más 64 años (44%), seguido del grupo de 45 a 64 años (30%).

El 79% de los pacientes con información disponible presentaban factores de riesgo de complicaciones de gripe, siendo los factores de riesgo más prevalentes la enfermedad cardiovascular crónica (31%), la diabetes (27%) y la enfermedad pulmonar crónica (25%), y en los menores de 15 años la enfermedad cardiovascular crónica (9%) la enfermedad pulmonar crónica (6%), y enfermedad renal crónica inmunodeficiencia (3%). En el 78% de los casos la gripe derivó en neumonía y el 29% ingresaron en UCI. El 11,5% de los casos hospitalizados graves han muerto, siendo el 76% personas mayores de 64 años. El 63% de las defunciones han sido hombres.