La primera ola de una nueva clase de medicamentos antienvejecimiento ha empezado a probarse en humanos. Inicialmente su objetiovo no es prolongar la vida, si no tratar enfermedades específicas retrasando o revirtiendo el proceso básico del envejecimiento, tal y como se recogen en la revista MIT Technology Review.
Se trata de los denominados medicamentos senolíticos y funcionan eliminando ciertas células que se acumulan en el organismo a medida que envejecemos y crean pequeñas inflamaciones que suprimen los mecanismos normales de reparación celular y generan un ambiente tóxico para las células vecinas.
La publicacición, editada en español por la firma global de innovación Opinno, destaca, por ejemplo, que el pasado junio, Unity Biotechnology, con sede en San Francisco (EE. UU.), presentó los primeros resultados de pacientes con osteoartritis de rodilla en estadio leve a moderado. En la segunda mitad de 2020 se esperan los resultados de un ensayo clínico más amplio. La compañía también está desarrollando medicamentos similares para tratar enfermedades oculares y pulmonares relacionadas con la edad, entre otras. Los medicamentos senolíticos ya se están probando en humanos, junto con una serie de otros enfoques prometedores centrados en los procesos biológicos que tienen su raíz en el envejecimiento y en diversas enfermedades.
Además de los medicamentos antienvejecimiento, la tecnología que más promete cambiar la vida de sus usuarios es la medicina hiperpersonalizada. La medicina genética ofrece esperanza a personas con enfermedades actualmente sin cura, desarrollando fármacos ‘ad hoc’ que se pueden adaptar a los genes de cada persona.
Así mismo, la compañía biofarmacéutica especializada en enfermedades neurodegenerativas Alkahest ha encontrado múltiples componentes en la sangre de personas jóvenes con los que se podría detener el deterioro cognitivo y funcional en pacientes con la enfermedad de Alzheimer en estadio leve a moderado. Esta compañía también haciendo pruebas en humanos con medicamentos para la enfermedad de Parkinson y otras demencias.
En este sentido, la la revista MIT Technology Review destaca que «todas estas pruebas reflejan los esfuerzos cada vez mayores de los investigadores para averiguar si las muchas enfermedades asociadas al envejecimiento, como los trastornos cardíacos, la artritis, el cáncer y la demencia, podrían ser hackeadas para retrasar su aparición».
Las 10 tecnologías emergentes en 2020, según la revista MIT Technology Review, serán además de las dos anteriores el Internet imposible de hackear, la medicina hiperpersonalizada, la moneda digital, el antienvejecimiento, la IA capaz de descubrir compuestos para nuevos fármacos, las megaconstelaciones de satélites, la supremacía cuántica, la IA diminuta, capaz de ejecutar aplicaciones en un smartphone, la privacidad diferencial; y la responsabilidad del cambio climático. Estos serán los 10 avances tecnológicos que marcarán una diferencia real en la resolución de problemas importantes, elegidos por su capacidad para cambiar nuestra forma de vivir y trabajar. Tal y como destaca Pedro Moneo, publisher del MIT Tech Review en español y CEO y fundador de Opinno, “las nuevas tecnologías son un gran impulso que nos permite transformar la manera en cómo trabajamos para seguir innovando”.