La gran mayoría de los españoles mayores de 60 años (el 91,4%) desconocen la forma más común de la valvulopatía cardíaca, una enfermedad grave que, en el caso de falta de tratamiento, podría devenir mortal, siendo este rango de población el más afectado, tal y como revelan los datos de una encuesta publicados con motivo de la Semana Europea de Concienciación de las Valvulopatías.
Según este estudio, muchos españoles mayores de 60 años son cuidadores (29,9%) y miembros activos en sus comunidades (74,8%), por lo que esta enfermedad no sólo afectará a la calidad de vida individual, sino que también podría tener un efecto en cadena sobre la carga de la atención sanitaria. Y con una población que ya sufre el problema del envejecimiento, las valvulopatías son un verdadero motivo de preocupación, advierten los expertos.
En su forma más grave, más de la mitad de los pacientes con estenosis aórtica severa (valvulopatía más común) mueren en los dos años siguientes a la aparición de los síntomas. En el caso de la estenosis aórtica, es preocupante que sólo uno de cada cinco españoles mayores (21%) busque ayuda médica para descubrir algunos de los síntomas de la enfermedad, lo que supone evitar oportunidades de detección temprana. Tres de cada cuatro españoles encuestados (74,6%) afirman que los síntomas les impedirían realizar actividades físicas (61,7%), aficiones e intereses (27,9%) o relaciones sexuales (24,9%). Es decir, un impacto significativo en la vida diaria.
Por otra parte, la encuesta muestra que un tercio de los españoles consultados cuidan a alguien cercano, y casi el 40% (37,7%) de las mujeres mayores de 60 años mayores cuidan a un ser querido. Sin embargo, casi un tercio (28,9%) de los encuestados dijeron que los síntomas de estenosis aórtica les impedirían cuidar a esas personas cercanas, lo que podría aumentar la carga de la atención sanitaria de la comunidad.
La importancia de la concienciación y la detección temprana de la enfermedad
Las personas mayores contribuyen de forma crucial a la moderna economía global y a nuestra sociedad. También son un grupo activo, pues el 74,8% participa regularmente en actividades voluntarias, comunitarias, sociales o físicas. Por lo tanto, la concienciación y la detección temprana de esta enfermedad no sólo es importante para las personas mayores, sino también para las personas que dependen de ellas, la comunidad y la economía en general.
En este sentido, tal y como afirma Mª Cecilia Salvador González, Presidenta de AEPOVAC (Asociación Española de Portadores de Válvulas Cardiacas y Anticoagulados), «nuestra población de edad avanzada es un factor clave, aunque subestimado, que contribuye al funcionamiento eficaz de nuestras comunidades, familias y economías, por lo que mejorar el conocimiento, el diagnóstico y el tratamiento de las valvulopatías nos beneficiará a todos», recalcando que «la encuesta demuestra que tenemos que redoblar esfuerzos para concienciar a la sociedad de esta enfermedad. Si tienes más de 60 años es importante que escuches a tu corazón y le pidas a tu médico de cabecera una revisión con el fonendoscopio», señala Cecilia Salvador González.
Y es que muchas personas que viven con valvulopatías no experimentan síntomas graves o perceptibles, o simplemente atribuyen sus síntomas al envejecimiento, lo que hace que el diagnóstico de la enfermedad sea difícil. La detección inicial de la enfermedad implica la identificación de los síntomas a través de la auscultación. Precisamente, en lo que respecta a las revisiones con fonendoscopio para personas mayores en cada visita al médico de cabecera, España está muy por detrás de sus vecinos europeos (España: 16,3%, Europa: 28,2%, Francia: 76,1%). Hay una variación sustancial en toda España en las revisiones con fonendoscopio para personas mayores en cada visita al médico de cabecera, que va desde un tercio (31,3%) en Extremadura, a menos del 9% (8,6%) en la Comunidad Valenciana.
“Las enfermedades valvulares afectan a una gran parte de la población y especialmente en relación con el envejecimiento. Suponen una cuarta parte de los problemas cardiovasculares que implican un ingreso hospitalario y conllevan una importante mortalidad si no son tratadas, en ocasiones muy por encima de otras enfermedades mas conocidas como el cáncer” explica la Prof. Dra. Marta Sitges, Directora del Instituto Cardiovascular del Hospital Clínic de Barcelona y profesional que ha dirigido la encuesta global.
A juicio de esta experta, “a pesar de que existen buenos métodos para diagnosticarlas y tratarlas, siguen siendo enfermedades muy olvidadas, con mucho retraso en su diagnóstico y con tasas muy elevadas de infradiagnóstico, que hacen que muchos de estos pacientes que podrían beneficiarse de un tratamiento efectivo, no lo reciban. Es imprescindible aumentar el conocimiento en la población de estas enfermedades, que se pueden tratar adecuadamente y con éxito, mejorando la calidad de vida y la supervivencia de esta población”.
El diagnóstico temprano de la valvulopatía es esencial
Valvulopatía es el nombre que se le da a cualquier mal funcionamiento o anormalidad de una o más de las cuatro válvulas del corazón, que afecta al flujo de sangre a través del corazón y suele estar asociada con el envejecimiento. Es una condición común y seria, pero que tiene tratamiento. Si se diagnostica a tiempo, los pacientes pueden volver a tener una buena calidad de vida, por lo que el diagnóstico temprano es esencial. La afección suele ser causada por enfermedad, desgaste o daño de la válvula o válvulas del corazón. Entre los principales síntomas se encuentran la opresión/dolor en el pecho, los latidos anormales del corazón y la falta de aliento.