Aqua free, grupo alemán especialista en higiene del agua, ha renovado algunos de sus productos para la prevención de la Legionella, que ahora incorporan también en el disco de salida del agua la tecnología “Metal Skin Medical”, lo que permite proteger aún más frente a la Legionella y eliminar el SARS-COV2.

Los nuevos productos de Aqua free mantienen su eficacia en la filtración de la Legionella (99,99999% de protección en la filtración) y a partir de ahora su tecnología Metal Skin Medical permite eliminar de su superficie el 99,5% de SARS-CoV2 (virus causante de la enfermedad COVID-19) en menos de 4 horas.

Esto resulta especialmente importante en las residencias de ancianos, que son lugares con un elevado riesgo en lo que a infecciones transmitida por el agua se refiere, dado que el sistema inmune de los residentes suele estar debilitado. Por ello, se deben extremar las medidas de seguridad en las residencias de personas mayores, así como en los centros de día, ya que se trata de un grupo de población que tiene un mayor riesgo de sufrir las consecuencias de esta bacteria.

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Los filtros antibacterianos de Aqua free se han renovado para proteger aún más frente a la Legionella y eliminar el SARS-COV2 en las salidas de agua


Y pese a los esfuerzos realizados en la prevención y control de la Legionella en estos establecimientos, sigue presente en muchos de ellos. Así, en un estudio realizado en la Comunidad Valenciana y publicado en la revista Salud Ambiental (2019;19 (Espec. Congr.):135-235), revela que a pesar de que más del 80% de las residencias poseía un programa de mantenimiento adecuado para la prevención de la Legionella, se realizaban las preceptivas analíticas y los parámetros de temperatura y cloro libre residual eran adecuados, se detectó la presencia de Legionella en el 50% de las residencias estudiadas. En más del 20% de las mismas se detectó Legionella en más de un 30% de los puntos muestreados o con niveles elevadísimos. Un porcentaje no despreciable de los casos diagnosticados de Enfermedad del Legionario (equivalente a una neumonía) se registran en residencias de ancianos.

Por ello, el uso de filtros antibacterianos en punto de uso (duchas, lavabos…) es una medida eficaz y recomendable que proporciona agua de grado estéril a su salida, ofreciendo una mayor seguridad al tratarse de agua libre de Legionella y otros patógenos en un 99,99999%.

Los filtros se pueden utilizar de manera proactiva, constante en determinadas habitaciones, o también colocarlos una vez detectado un positivo por Legionella en alguno de los puntos de uso, previniendo de este modo la infección y evitando cerrar el punto de uso o la habitación, a la vez que se gana tiempo para implementar las medidas apropiadas de desinfección. Todo ello proporciona también un ahorro de costes de mantenimiento a la vez que se aumenta la seguridad y la higiene del agua.

Aqua free dispone de un amplio abanico de estos filtros para garantizar la ausencia de Legionella en el agua utilizada en los centros de atención a personas mayores.

Tal y como indica la Organización Mundial de la Salud (OMS), la legionelosis presenta importantes variaciones en cuanto a su gravedad, pues incluye desde afecciones leves que cursan con fiebre hasta algunas formas de neumonía potencialmente mortales. Su causa principal es la exposición a especies de Legionella presentes en el agua y, a nivel mundial, la Legionella pneumophila, transmitida por el agua, es la que más comúnmente causa casos de infección e incluso brotes epidémicos.

La probabilidad de enfermedad depende de la concentración de Legionella en la fuente de agua, de la producción y dispersión de aerosoles, de factores relacionados con el paciente, como la edad y la existencia de afecciones preexistentes o enfermedades crónicas, y de la virulencia de la cepa particular de Legionella que se trate. En sujetos inmunodeprimidos no tratados la tasa de mortalidad puede llegar a situarse entre un 40% y un 80%, aunque se puede reducir a un 5% – 30% mediante un manejo de casos apropiado y en función de la gravedad de los signos y síntomas clínicos. En términos generales, la tasa de mortalidad oscila entre un 5% y un 10%, señala la OMS.