Campofrío ha firmado un acuerdo de colaboración con Médicos del Mundo para realizar una actuación de diseño y formativa en diez centros residenciales y de día para personas mayores ubicados en dos de las comunidades donde opera: Castilla y León y Castilla-La Mancha.
En concreto, las intervenciones, que serán llevadas a cabo por personal de Médicos del Mundo debidamente cualificado en la gestión de pandemias, consistirán en la revisión y diseño de los protocolos de prevención del coronavirus de dichos centros, la actualización de sus planes de contingencia y la formación del personal sociosanitario en la prevención y control de infecciones y pandemias.
Tal y como señala Felicitas Ibáñez, coordinadora médica del proyecto de Médicos del Mundo, “con la primera ola, quedó demostrado que las personas mayores son el colectivo más vulnerable frente al coronavirus, por lo que desde Médicos del Mundo entendimos la urgencia de apoyar a estos centros para evitar más sufrimiento».
Hasta el momento esta ONG ha intervenido en 25 residencias de mayores en España y formado a más de 750 profesionales socio sanitarios. «Les enseñamos a aplicar los protocolos para la prevención y control de la infección, a través de la delimitación del espacio en zonas rojas y verdes -contaminadas y no contaminadas-, el correcto vestido y desvestido de los trajes de protección (EPI) o la gestión de casos positivos. De esta manera, los profesionales tienen más seguridad a la hora de intervenir y eso se traduce en más calidad de vida para las personas residentes», indica Felicitas Ibáñez, que destaca que «con el apoyo de Campofrío, seguiremos trabajando para que estos centros sean el hogar seguro que nuestros mayores merecen».
Las intervenciones se articulan en tres fases:
En primer lugar, Médicos del Mundo desarrollará un módulo de formación para mejorar los conocimientos sobre prevención y control de infecciones (IPC) entre el personal sociosanitario. La utilización de espacios de uso común o las zonas de aislamiento; la gestión de las muestras biológicas y los servicios de farmacia, lencería, residuos y cocina; el seguimiento sanitario a los diferentes tipos de residentes; el manejo de los Equipos de Protección Personal (EPP), o el apoyo emocional orientado a personas trabajadoras, son algunos de los aspectos que se tratarán durante la formación.
En segundo lugar, se llevará a cabo una revisión de los protocolos de prevención y control de la infección (IPC) y de los diferentes planes de contingencia de cada centro residencial, estableciendo recomendaciones de mejora. Y finalmente, la ONG mantendrá un seguimiento para atender las consultas de los centros durante los siguientes meses.
Para Campofrío, esta colaboración se engloba dentro de su proyecto transversal @MAYORES, una de las iniciativas de RSE de la compañía que busca poner en valor la aportación que puede hacer este colectivo a la sociedad, a la par que promover un estilo de vida activo y saludable para ellos y mejorar su calidad de vida.
«Por medio de este acuerdo, Campofrío desea contribuir al refuerzo de la capacidad de respuesta de las residencias y centros de día ubicados en las comunidades donde estamos presentes, ayudando a prevenir el contagio de las personas mayores y del personal sociosanitario que las atiende», señala José Antonio Ortuño, director de RSC de Campofrío.
Este proyecto se suma a otras actuaciones previas de esta compañía en favor del colectivo de mayores durante la pandemia. A principios de la emergencia sanitaria, Campofrío colaboraba con Fundación Alares para poner a disposición de las personas de edad avanzada, una línea telefónica de atención y escucha activa, para ayudar a mitigar el impacto emocional que tendría el aislamiento en ellas.