Un artículo de ILUNION Sociosanitario
Desde hace más de un año, en el centro ILUNION Sociosanitario Parla, llevamos a cabo varias intervenciones no farmacológicas enfocadas en prevenir o tratar aquellos aspectos físicos o psíquicos que afectan a las habilidades y capacidades de la persona con deterioro cognitivo moderado/severo, y que ponen en riesgo su autonomía y su autoestima, entre otros. Por el momento, estamos trabajando con tres terapias:
- la terapia con música
- la intervención con muñecas
- la intervención con mascotas robot
El objetivo principal por el cual aplicamos estas tres intervenciones es el de mantener preservadas durante el mayor tiempo posible las capacidades y habilidades cognitivas y funcionales de los residentes. También nos ayudan a fomentar las relaciones interpersonales, y disminuir posibles trastornos conductuales asociados a la demencia.
Los principales beneficios que hemos observado entre los residentes con los que llevamos a cabo estas terapias han sido: mejora en la autonomía, en la autoestima y el bienestar emocional y conductual. También hemos observado una mejora en las actividades de la vida diaria y calidad de vida en el centro. Veamos con más detalle las terapias aplicadas:
La utilización de la música de forma activa o pasiva está dirigida a estimular capacidades cognitivas, a provocar un refuerzo afectivo y mejorar el estado físico. La terapia musical que realizamos en nuestro centro consiste en el uso de la música y /o de sus elementos musicales (sonido, ritmo, melodía, armonía) con un grupo, facilitando y promoviendo la comunicación, el aprendizaje, la movilización, la expresión u otros objetivos terapéuticos relevantes, con el fin de lograr cambios y satisfacer las necesidades físicas, emocionales, mentales, sociales y cognitivas.
Las personas con demencia pueden emplear la música para activar el recuerdo de momentos importantes vividos en su vida. Con frecuencia, podría parecer que estos recuerdos de vivencias y sensaciones ya hubieran desaparecido de la memoria de esas personas, pero no es así. La música puede reactualizarlas y rescatar esos recuerdos con suavidad a su conciencia de manera satisfactoria.
Entre los objetivos de este tipo de intervención se encuentran: desarrollar destrezas manipulativas finas; favorecer el conocimiento físico, emocional, intelectual y social de uno mismo; desarrollar la atención a uno mismo, a otros y al entorno físico; la expresividad emocional; fomentar las relaciones interpersonales; favorecer la comunicación verbal y no verbal, y aumentar la autoestima entre otros.
El escuchar canciones de su vida, cantarlas e incluso bailarlas, son actividades que activan de forma natural la atención auditiva, el lenguaje comprensivo y expresivo, la memoria, el movimiento consciente y la afectividad vinculada a dichas canciones.
La música, además de proporcionar a las personas con demencia mucha calidad de vida en el aspecto emocional, les puede calmar, activar y ofrecer bienestar y sentimientos positivos en la relación con los demás.
Durante la intervención con terapia con muñecas y mascotas robot debemos tener en cuenta la historia de vida de cada residente, favoreciendo la conexión con el entorno, las relaciones interpersonales y la comunicación. Estas terapias se desarrollan en base a los proyectos vitales de los mayores, desde el respeto a su dignidad e individualidad y siguiendo el modelo de Atención Centrada en la Persona.
La terapia debe ser valorada y supervisada, siempre, por un profesional formado en este tipo de terapias. Se puede realizar de manera individual, por ejemplo, en momentos de alteración conductual (ducha, alimentación, sueño), así como de manera grupal, para favorecer relaciones y vínculos sociales.
Dentro de los principales beneficios de este tipo de terapias se encuentran: reducir la ansiedad y el estrés, así como el sentimiento de soledad; mejorar la autoestima, la comprensión sobre sí mismo y reforzar su autoconcepto así como su autocontrol; mejora del estado de ánimo de los usuarios; refuerza las capacidades físicas de las personas mayores; se evidencia un aumento del nivel de actividad, favoreciendo el abordaje de los síntomas negativos de la demencia; estimular las capacidades cognitivas y el desarrollo de interacciones sociales, mejorando las relaciones sociales de los diferentes usuarios, con el fin de mantener en la medida de lo posible las actividades básicas de la vida diaria.
La conexión terapéutica con la muñeca o con la mascota robot se puede encontrar en muchas acciones como besos, caricias, cantar, hablar, acunar, sonreír, etc. Este tipo de conductas siempre han de ser percibidas como conductas terapéuticas. Es importante indicar que no son conductas de juego, sino que tienen un objetivo terapéutico, cuyo uso debe ser evaluado en función de las reacciones que experimente la persona.
Sobre la autora
Nuria Muñoz Gallardo es Licencia en Psicología Clínica y de la Salud por la Universidad Autónoma de Madrid (UAM); Máster en Gerontología y Atención a la Tercera Edad por la U.N.E.D; Licencia de Ejercicio en T2E – Fundación María Wolff; Miembro destacado de I+D (Investigación y Desarrollo) en Fundación María Wolff. Formación en Música para Despertar, Terapia con muñecas y mascotas robot.