Con el objetivo de difundir medidas concretas para reducir el impacto de la diabetes tipo 2, una patología que afecta a casi seis millones de personas en España, y recabar la adhesión de todos los agentes sociosanitarios, desde la Federación Española de Diabetes (FEDE) se ha presentado el ‘Pacto Nacional por la diabetes tipo 2’.
En este informe, FEDE identifica 13 problemas, basados en diferentes estudios médicos y económicos, y propone 13 soluciones a los mismos para dar respuesta a estas necesidades todavía sin una respuesta adecuada. El principal propósito de las medidas planteadas es destinar los recursos necesarios para que mejoren áreas clave como son la formación diabetológica para pacientes y familiares; la prevención o el diagnóstico precoz, con el fin de mejorar la atención que reciben de los pacientes con diabetes tipo 2, y evitar que se merme su calidad de vida; así como reducir las hospitalizaciones e ingresos en urgencias.
Tal y como señala Juan Francisco Perán, presidente de FEDE, «la mitad de estos pacientes diagnosticados no reciben ninguna orientación sobre su enfermedad, según nuestros datos; a lo que se suma que un alto porcentaje aún están sin diagnosticar. En ambos casos el principal motivo es que la Administración no proporciona los recursos necesarios ni en formación ni para el abordaje adecuado de la enfermedad».
Todo ello genera «miles de complicaciones, que van desde amputaciones hasta fallecimientos prematuros por enfermedades cardiovasculares, además de una carga inasumible para el sistema sanitario de ingresos en urgencias y hospitalizaciones», advierte el presidente de FEDE.
Desde esta Federación se recalca que el 80% de los casos de diabetes tipo 2 podrían prevenirse con medidas educativas como el fomento de un estilo de vida saludable, «pero sobre el que no se informa ni se forma a la mitad de los pacientes que reciben un diagnóstico de diabetes», según se refleja en el ‘Pacto Nacional por la diabetes tipo 2’.
A ello se une la carga económica que supone la diabetes. Según datos de la Sociedad Española de Diabetes (SED), en España se diagnostican 386.003 nuevos casos de diabetes tipo 2 al año, es decir, 1.057 al día. Estas cifras hacen que esta patología suponga el 8,2% del total del presupuesto sanitario 5.809 millones de euros anuales, según la Guía metodológica para estimar costes asociados de la diabetes.
«La diabetes tipo 2 se ha convertido en una de las principales causas de enfermedades cardiovasculares, insuficiencia renal y ceguera, entre otras comorbilidades incapacitantes, que generan altos costos humanos, sociales y económicos», advierte el presidente de FEDE. En este sentido, un estudio del Hospital Ramón y Cajal estima que el coste promedio de las complicaciones macro y microvasculares de las personas con diabetes es de 4.124 euros.
Problemas y soluciones en asistencia, formación, investigación y tecnología
Para trata de revertir esta situación, en el ‘Pacto Nacional por la diabetes tipo 2’ se incluye problemas y soluciones en los ámbitos de la asistencia, la formación, la investigación y la tecnología, entre otros. «Las consecuencias de la diabetes tipo 2 deben abordarse desde diversos frentes ya que esta patología, que afecta a casi 6.000.000 de españoles, no solo incide en la salud de las personas que la padecen sino también en diferentes esferas económicas y sociales como la educación o la innovación», indica Perán.
Ámbito sanitario
Las propuestas en el ámbito sanitario promoverán campañas de concienciación efectivas para realizar un diagnóstico precoz de la alteración en el metabolismo de los carbohidratos, que afecta a casi el 30% de la población. También se pretende conseguir un cribado que permita reconocer a los pacientes con diabetes de alto riesgo.
Se solicita también el establecimiento de consultas rutinarias para prevenir y abordar las complicaciones crónicas para paliar el aumento de las comorbilidades y disminución de la calidad de vida de los pacientes. La FEDE propone asistencia continua, integral y planificada y educación diabetológica de forma individual, conjunta, continuada en el tiempo y personalizada.
Nuevas tecnologías
Además, se plantea impulsar el uso de las nuevas tecnologías en las comunidades autónomas que aún no disponen de estos recursos. Se apuesta por una telemedicina interactiva en tiempo real como un mecanismo factible para los programas de prevención de diabetes y la evidencia sugiere que sus resultados se mantienen a largo plazo. Se solicita, asimismo, invertir en la investigación de nuevos fármacos y mejorar el acceso a nuevas insulinas costo-eficientes y que han demostrado mejorar la calidad de vida de los pacientes.
Formación del profesional sanitario
Este documento también refleja la importancia de reconocer la capacitación continua del profesional sanitario. «Se les debe formar en aspectos que incluyan modificaciones en los estilos de vida del paciente, manejo no farmacológico de los factores de riesgo, mejorar el abordaje de la adherencia y educación en nutrición a favor de alimentos no procesados», comenta el presidente de FEDE. Otra de las propuestas consiste en la recuperación de la figura de enfermería escolar para ofrecer educación en salud desde la infancia.
Salud emocional del paciente
FEDE advierte igualmente sobre la necesidad de atender la salud emocional de la persona con diabetes tipo 2, ya que estos pacientes tienen entre 2 y 3 veces mayor probabilidad de presentar depresión que las personas sin diabetes. Por ello, se solicita la creación de grupos de apoyo y acceso a sanitarios con formación en salud emocional en enfermedades crónicas.
Por último, se hace hincapié en la necesidad de una mayor participación de la persona con diabetes tipo 2 en la toma de decisiones que afecten a su patología y de promover la participación de los representantes de los pacientes en la definición de las políticas sanitarias que les afecten como colectivo.
El ‘Pacto Nacional por la diabetes tipo 2‘ se enmarca dentro de las acciones de la campaña ‘No des la espalda a la diabetes‘, una iniciativa de FEDE que incluye actividades de concienciación en las redes sociales y en entidades públicas y empresas privadas, así como encuentros con representantes políticos y sociales.