Un artículo de Inés Varanda Seixas, Nutricionista, colaboradora de Campofrio Health Care
y Romina Polo i Nolla, Nutricionista y Key Acount de Campofrio Health Care
El bienestar es la experimentación de salud, felicidad y prosperidad esto incluye tener buena salud mental, sentirse altamente satisfecho con la vida, tener un sentido de significado o propósito, y la capacidad para manejar el estrés. De forma más general, el bienestar es la condición de estar bien, notando seguridad, tranquilidad y armonía a nivel personal y en el entorno en el que una persona se desarrolla.
La OMS define bienestar como: «La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades» (1). En las personas mayores para conseguir este bienestar y esta calidad de vida, el mérito no es únicamente el tener controladas parte de sus patologías, en ellos también hay que buscar la integración del bienestar global de la persona y conseguir los cuatro estadios que engloban el bienestar, tanto físico, mental, emocional y social.
Para lograr este estado tenemos una serie de criterios farmacológicos que van a permitir el logro de la mejoría física, pero existen muchas más terapias no farmacológicas para poder llegar a este estadio.
Un resumen de ellas pueden ser :
- Intervenciones psicosociales
Las intervenciones psicosociales en personas mayores han demostrado ser muy eficaces en nuestros mayores pudiendo a veces funcionar mejor que los fármacos para ciertos aspectos. Los objetivos de estas intervenciones son en su gran mayoría relacionados con preservar la motricidad, las habilidades para socializar, incrementar la autonomía en AVD, enlentecer el avance de enfermedades preexistentes y mejorar la calidad de vida de los mayores, así como de su entorno.
Las terapias psicosociales se pueden ejercer al mayor y al familiar o cuidador. Ambas son de igual importancia. Existen distintas categorías según el área que se pretende reforzar: emocional, motor, cognitivo, integral…
Para mayores con Alzheimer las terapias más utilizadas son la arteterapia, la musicoterapia y la estimulación cognitiva. Es de gran importancia y utilidad que el cuidador también acuda a estas sesiones de terapia para poder darles continuidad en el hogar o en el centro donde resida el mayor.
La estimulación cognitiva es en su esencia, la estimulación del cerebro. La musicoterapia es una herramienta perfecta para desbloquear emociones y recuerdos través de la audición de música. Otra terapia que cada vez se utiliza más debido a su eficacia contra el estrés y de aumento de las defensas, es la risoterapia. ¡Que importantes es reírse!
- Intervenciones físicas
El ejercicio físico en los mayores es uno de los pilares diarios que hay que potenciar, para mantener activo el riego de las células ósea, evitar la atrofia de los músculos y reforzar la musculatura,
Ejercicios suaves de rotaciones del cuerpo y extremidades , de concentración con movimiento (tipo thai chi( , de musculatura (pilates) y de relajación (yoga) hace que nuestros mayores puedan durante sus clases reforzar su cuerpo y poder conseguir un ligero cansancio lo que les permitirá poder conseguir conciliar mejor el sueño.
Cuando la movilidad es reducida, debe ser un cuidador y/o rehabilitador que le ayude a realizar estos ejercicios para poder mantener una mejor calidad de sus músculos y un menor daño estructural. En algunos casos las piscinas o bañeras suelen ser una buena alternativa para practicar el “aquagim” con los beneficios de la flotabilidad y una sensación de ligereza para el mayor.
- Intervenciones emocionales
Es uno de los aspecto muy importantes para poder conseguir es el bienestar emocional en nuestros mayores. En muchos casos existe una degeneración cerebral que hace difícil poder activar este placer emocional. Aun así, el mindfulness, basado en la focalización de la atención en el momento presente, es un método para conseguir la atención plena, centrándonos en lo sentimos en este preciso momento, liberando la mente y permitiendo disfrutar del momento que se vive.
El mindfulness en algunos casos también se utiliza como metodología para la alimentación bondadosa consciente: Re-aprende a comer, adaptándose a la nueva situación física para poder volver a disfrutar de la comida de forma consciente. En este proceso también es muy importante el cuidador y el potenciar el sabor organoléptico de los platos.
Y aprovechando las nuevas tecnologías, las gafas de realidad virtual, permiten activar el córtex del recuerdo y recuperar sentimiento de la nostalgia y revivir sensaciones olvidadas.
Y para ayudar apoder conseguir este bienestar completo podemos sumar las Terapias Fito terapéuticas.
En su gran mayoría nuestros mayores están muy medicados farmacológicamente y muchos buscan a consecuencia, soluciones naturales para resolver ciertos problemas o incluso para sustituir alguna medicación pautada por el médico. La fitoterapia es una solución más natural, y menos perjudicial que los químicos de los medicamentos convencionales.
Debe ser un tratamiento bajo control médico (o especialista sociosanitario) y teniendo en cuanta las interacciones que en algunos casos puede existir con los fármacos, de ahí que no se pueden usar de forma arbitraria
Los productos que adquieren más relevancia y destacados son remedios para el estreñimiento, ya sea en cápsulas o polvos de un extracto de las plantas o infusiones; productos para paliar los dolores de artritis o dolores musculares; y complementos para mejorar la calidad de sueño tales como la valeriana y la pasiflora.
Últimamente se nota un mayor interés por mejorar la memoria y la capacidad cognitiva con suplementación de plantas como el ginko biloba, la bacopa o el ginseng. El harpagofito y la uña de gato son antiinflamatorios muy recomendados por sus propiedades antiinflamatorias.
Pero sin duda la Coenzima Q10 y el DHA (omega 3) son las joyas de la corona para suplementación de nuestros mayores. La coezima Q10 o ubiquinona es un antioxidante que ayuda a prevenir afecciones cardiacas y migrañas. El DHA es un ácido graso esencial para el desarrollo y el mantenimiento de la función cerebral.
Finalmente la terapia no farmacológica más resolutiva para el bienestar que existe en nuestra sociedad es el no olvidarnos de nuestros mayores, respetarlos por sus fragilidades y demencias y quererlos con nosotros para que no caigan en el olvido ni ellos ni sus sentimientos.
- Preámbulo de la Constitución de la Organización Mundial de la Salud, que fue adoptada por la Conferencia Sanitaria Internacional, celebrada en Nueva York del 19 de junio al 22 de julio de 1946, firmada el 22 de julio de 1946 por los representantes de 61 Estados (Official Records of the World Health Organization, Nº 2, p. 100), y entró en vigor el 7 de abril de 1948. La definición no ha sido modificada desde 1948.