El Instituto Tecnológico del Plástico (AIMPLAS) está participando en el desarrollo una bandeja calefactable elaborada en materiales termoplásticos que permite la regeneración o calentamiento de los alimentos in situ por cada paciente en la propia habitación, sin necesidad de ningún equipo de calentamiento externo.
Se trata de una solución para acabar con el inconveniente de que los alimentos emplatados y calentados en los servicios centrales de los hospitales lleguen templados o ya fríos al paciente, ya que el uso de bandejas isotérmicas no resulta suficiente para conservar la temperatura adecuada durante su distribución.
El proyecto D-CALENT, financiado por la Agencia Valenciana de la Innovación (AVI) y en el que AIMPLAS colabora junto a la Universidad de Valencia, permitirá mantener calientes los alimentos elaborados y que estos resulten más apetecibles en el entorno hospitalario.
Como indica Victor Sevilla, Investigador Principal del proyecto de D-CALENT y técnico de la célula de Ingeniería de AIMPLAS, para conseguirlo se está trabajando en el desarrollo e integración de «una resistencia calefactable, flexible y de capa fina en la estructura de la bandeja para el catering de los hospitales». Todo ello «va a permitir contar con una solución de bajo coste, eficiente, y reutilizable para uso en cualquier entorno hospitalario».
Más allá de los tradicionales microondas que se podrían instalar en cada habitación, pero que supondrían unos elevados costes de inversión, mantenimiento y limpieza, en la actualidad no existe ninguna solución de bandeja reutilizable y de bajo coste que permita calentar o regenerar la comida en la propia habitación del paciente.
La nueva bandeja calefactable permitirá regenerar o calentar los alimentos en la propia habitación del paciente conectándola a través de una conexión USB a la toma de corriente convencional, con un consumo energético eficiente inferior a 30W. La bandeja alcanzará una temperatura entre 70º y 80ºC y estará realizada de materiales termoplásticos como son PP y ABS.
Además, la bandeja «será compatible con los procesos industriales que se desarrollan en las cocinas de todos los hospitales, poniendo el foco en el lavado automático y en las dimensiones estándar de este tipo de servicios, así como en la seguridad alimentaria», concluye el técnico de la célula de Ingeniería de AIMPLAS.
Los resultados del proyecto se transferirán a diferentes empresas del sector del packaging, como ITC Packaging, Pohuer o SP Berner; también a empresas de catering y alimentos precocinados; así como en entidades dedicadas a la salud como la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunitat Valenciana (FISABIO) y la Fundación Investigación Hospital General Universitario de Valencia.
Esta bandeja calefactable contribuirá a mejorar la restauración hospitalaria y facilitar que el paciente se recupere de su enfermedad lo más rápido posible, para lo que necesita utilizar dietas adecuadas, métodos de elaboración seguros y un cuidado máximo para que los alimentos mantengan sus nutrientes. Además, también ayuda q que los alimentos resulten más apetitosos para los pacientes, algo fundamental teniendo en cuenta que, por lo habitual, los enfermos pierden el apetito a causa de la enfermedad.