Un artículo de Sonia Terrón Pérez,
Terapeuta ocupacional en atención domiciliaria, responsable de Mas Terapia en Madrid

Con la edad se van produciendo en el organismo cambios a nivel físico, psicológico y funcional, que pueden afectar a la calidad de vida de las personas. Estos cambios pueden ser más o menos acusados dependiendo de los hábitos adoptados, la dieta, la actividad física, etc.

Se habla de hábitos saludables a aquellas conductas que llevamos a cabo en nuestra vida cotidiana y que inciden positivamente en nuestro bienestar físico, mental y social. Principalmente son la alimentación, el ejercicio físico, el ejercicio mental, la participación social y el descanso.

En ocasiones, el envejecimiento lleva consigo una serie de enfermedades. Muchas de las enfermedades que aparecen en la edad adulta se asocian a unos hábitos nocivos como a una dieta poco equilibrada, a una vida sedentaria, al descanso insuficiente, al consumo de cualquier tipo de tóxico, a la falta de participación social, entre otros. Por lo tanto, la cognición, el ejercicio físico, la alimentación saludable, la socialización, el sueño y el descanso afectan a nuestra la vida diaria. Convertir estos hábitos en un estilo de vida es fundamental para un envejecimiento saludable.

La terapia ocupacional a domicilio desempeña un papel importante en el envejecimiento saludable. Interviene en los hábitos y rutinas, promueve la salud, la autonomía y el bienestar de la persona y de su familia, a través de diversos programas y actividades que interesan al adulto mayor y dan sentido a su vida.

Pretende que la persona mayor realice actividades por sí misma o con el menor número posible de apoyos, dentro de sus capacidades y adaptándolas en caso de existir dificultades. Tiene en cuenta las condiciones contextuales que pudieran afectar a su participación en las actividades de la vida diaria, tiene en cuenta sus necesidades, sus gustos, sus intereses, sus fortalezas, sus debilidades… De esta manera, previene situaciones de dependencia, incrementa su autoestima, su sentido de responsabilidad y su participación.

Algunos de los programas y actividades de terapia ocupacional que se llevan a cabo para promover los hábitos saludables y fomentar el envejecimiento activo en el domicilio como en su entorno son:

• Programa de memoria
• Programa de estimulación cognitiva
• Programa de entrenamiento de las funciones mentales: actividades para trabajar el área cognitiva como la atención, la memoria, el lenguaje, el cálculo, las funciones ejecutivas…
• Programa de ejercicio físico: actividades deportivas (natación, tenis, baile, yoga, taichí…), psicomotricidad y ejercicios para trabajar el área motora como ejercicios de resistencia o aeróbicos, de fortalecimiento, de equilibrio, de flexibilidad, etc.
• Programa de actividades de la vida diaria: actividades para trabajar a nivel funcional como el uso del móvil u otras tecnologías, la preparación de alimentos saludables, el cuidado del hogar, la gestión y mantenimiento de la salud, etc.
• Programa de autocuidado: actividades dirigidas a promover y mantener el bienestar personal, a fomentar hábitos adecuados de conducta y a adquirir habilidades básicas de autocuidado. Las actividades están relacionadas con la alimentación, la higiene, el vestido, la movilidad, con actuaciones sociosanitarias, entre otras.
• Programa de ocio: actividades para trabajar el área afectiva y social como actividades lúdicas (jugar a las cartas, al dominó, al ajedrez, etc.), actividades artísticas y creativas (pintura, manualidades, música…) y actividades culturales (teatro, cine, actividades a museos y exposiciones).
• Programa de bienestar emocional: actividades para trabajar a nivel emocional a través de la música, de actividades de reminiscencia, de relajación, de estimulación sensorial, entre otras.
• Programa de adaptación del entorno: el/la terapeuta ocupacional asesora al familiar/cuidador y a la persona mayor de cambios necesarios en el hogar para evitar accidentes y alcanzar la mayor autonomía posible.
• Programa de productos de apoyo: el/la terapeuta ocupacional informa, asesora y entrena en el uso de productos de apoyo según las necesidades de la persona para facilitar su participación en las actividades de la vida diaria.
• Programa de educación para la salud: formación y educación al adulto mayor y a sus familiares/cuidadores en hábitos saludables (alimentación equilibrada, higiene y descanso, seguridad en el hogar…).

Así pues, con estos programas el/la terapeuta ocupacional pretende mejorar la calidad de vida de las personas mayores, favoreciendo sus oportunidades de desarrollo para una vida saludable, activa y participativa, a través del desempeño de las actividades diarias, del cuidado de su salud, del mantenimiento de sus aficiones, del disfrute del tiempo libre, de su participación en actividades sociales y de la realización de actividades físicas y mentales.

Nunca es demasiado tarde para tomar buenas decisiones. Cualquier momento es bueno para introducir cambios en nuestra forma de vida que ayuden a prevenir la aparición de enfermedades, así como mejorar nuestro bienestar y calidad de vida.