La trombosis se ha convertido en una de las enfermedades cardiovasculares con mayor incidencia en España, con una incidencia de 116 casos anuales por cada 100.000 habitantes. Supone el tercer puesto como causa de mortalidad cardiovascular, tras el infarto de miocardio y el ictus.
Aunque la trombosis afecta a pacientes en cualquier tramo de edad, su incidencia se incrementa de forma importante a partir de los 40 años y puede aparecer tanto en hombres como en mujeres. En estas últimas, sobre todo en edad fértil, está estrechamente relacionada con el uso de tratamiento hormonal y con la gestación. Un problema que se agrava en el caso de los pacientes donde la trombosis se mezcla con otras patologías.
En este sentido, los episodios trombóticos puede ser la primera manifestación de un cáncer oculto, tal y como señalan desde LEO Pharma, compañía especializada en investigación, desarrollo y producción de heparinas de bajo peso molecular.
Y es que, tanto la trombosis venosa profunda (la formación de un coágulo de sangre en las venas profundas, generalmente, de las piernas o la pelvis) como la embolia pulmonar (cuando ese coágulo se traslada a través de la circulación y se aloja en los pulmones) son complicaciones frecuentes en los pacientes con cáncer. Se estima que 1 de entre cada 10 y 20 personas con cáncer desarrollará una trombosis venosa profunda o una embolia pulmonar. Las cifras se agravan si se observan en dirección opuesta: 1 de cada 5 casos de estos episodios aparece en personas que sufren un cáncer activo.
Además, la mortandad de la incidencia de cáncer y trombosis es superior y más grave que la combinación de cáncer-ictus y cáncer-infarto de miocardio. Como destaca, el Dr. Esteve Colomé, responsable médico de la Unidad de Trombosis de LEO Pharma, «el cáncer conduce a un estado de hipercoagulabilidad, provocando que la sangre se espese, favoreciendo la aparición de trombos. En este sentido, entre los principales factores de riesgo de la trombosis está la enfermedad neoplásica avanzada».
Estos riesgos son especialmente relevantes en los primeros meses tras el diagnóstico del tumor coincidiendo con el periodo en el que se realiza un tratamiento quirúrgico y quimioterápico más intenso contra el cáncer. La trombosis presenta una notable repercusión en la evolución de los pacientes con cáncer, empeorando su pronóstico. Sin embargo, es una enfermedad prevenible.
Estudio sobre la eficacia de la profilaxis del tromboembolismo venoso a largo plazo en pacientes con cáncer
Consciente del desafío terapéutico que supone la mejora de la prevención y el tratamiento de la trombosis, LEO Pharma colabora en el Estudio PROTINCOL, una iniciativa de investigadores independientes y que se iniciará el próximo mes de noviembre y que se presentó en la edición de este año del Foro de Oncología sobre Trombosis.
La identificación precisa de los enfermos que realmente requieren tratamiento anticoagulante constituye una necesidad de primer orden. De lo contrario, algunos pacientes podrían exponerse innecesariamente a un riesgo de sangrado.
En este sentido, la Dra. Mercedes Salgado, del servicio de oncología del Complejo Hospitalario Universitario de Ourense, resalta que «se trata de un estudio imprescindible porque no se ha estudiado la eficacia de la profilaxis del tromboembolismo venoso a largo plazo en pacientes con cáncer colorrectal metastásico que reciben quimioterapia».
«Los avances científicos en esta patología han permitido incrementar la supervivencia de los pacientes en esta situación clínica, con el uso de quimioterapia y terapias dirigidas, que secundariamente pueden incrementar el riesgo de trombosis, por lo que la prevención del tromboembolismo venoso adquiere una mayor relevancia», señala la experta.
El estudio, que es promovido por el Grupo Gallego de Investigación en Tumores Digestivos (GITuD), estará coordinado por la propia Dra. Mercedes Salgado y por el Dr. Andrés Muñoz del servicio de oncología del Hospital Universitario Gregorio Marañón de Madrid. Será el más ambicioso hasta la fecha en este campo a nivel ibérico, y también el primer ensayo clínico que aplicará técnicas de Medicina Personalizada en este área.
Contará con la participación de hasta 30 servicios de oncología repartidos entre España y Portugal. Por el momento, 19 centros españoles de 14 ciudades diferentes han confirmado su participación en el Estudio PROTINCOL. Durante el primer trimestre de 2023, se prevé que hasta 6 servicios de oncología de Portugal se incorporen también al estudio.