Con el paso de los años los problemas de visión se vuelven cada vez más habituales y, si no son controlados a tiempo, pueden llegar a perjudicar notablemente la salud de las personas mayores.
De hecho, un estudio de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG) en colaboración con la Fundación Salud Visual indica que el 80% de la población mayor de 60 años padece patologías de la vista y solamente el 20% mantiene actualizada la graduación de sus gafas.
Tal y como indica Emilio Dorronzoro, jefe de Oftalmología del Hospital Universitario Sanitas La Moraleja, “a partir de los 60 años la retina suele sufrir una pérdida del número de conos y bastones, que son los fotorreceptores encargados de captar la luz y comunicar esta señal al cerebro. También se daña el epitelio pigmentario de la retina, cuya función es alimentar y eliminar las sustancias de desecho para que los fotorreceptores funcionen correctamente, por lo que se produce una pérdida gradual de la agudeza visual”.
“En último lugar, con el paso de la edad es probable que el tamaño de la pupila disminuya, aparezcan cataratas y los párpados estén más flácidos, lo cual ocasiona que se necesite un volumen de luz mucho mayor para realizar cualquier tarea”, advierte el especialista.
Ante esta situación, expertos de Sanitas Mayores detallan los cambios de visión más comunes relacionados con el envejecimiento:
- Cataratas
Ocasiona una pérdida de visión lenta y escalonada. Causan síntomas como la borrosidad, deslumbramiento, visión distorsionada de las cosas o visión doble. Los colores se perciben de manera más oscura y se pierde sensibilidad en cuanto a contrastes. Se puede corregir mediante cirugía y se trata de una operación sencilla y de resultados exitosos.
- Degeneración macular
Con ella se pierde la visión central, es decir, no permite ver los detalles finamente, ya sea de cerca o de lejos. Se origina cuando la mácula, encargada de la visión nítida frontal, se ve perjudicada por el envejecimiento. Para ralentizar el proceso se recomienda tomar suplementos que aporten vitaminas y minerales.
- Desprendimiento de la retina
Ocurre cuando la retina se desplaza de la parte de atrás del ojo. Es un problema ocular grave que debe ser tratado cuanto antes para no perder la visión de manera total. Personas que hayan sido operadas de cataratas o sufran ciertos tipos de afección ocular, tienen más posibilidades de padecer esta dificultad.
- Miopía e hipermetropía
Las personas que sufren miopía tienen dificultad para ver de lejos, mientras que aquellas que sufren hipermetropía, ven peor de cerca. Ambos son cambios de visión comunes fácilmente corregibles a través del uso de lentes de contacto.
- Presbicia
Es uno de los problemas más comunes que causa el envejecimiento. Se produce cuando no se pueden ver con facilidad tanto objetos cercanos como letras pequeñas. Provoca dolor de cabeza y cansancio visual, pero si es detectado a tiempo se puede corregir fácilmente usando gafas o sometiéndose a una cirugía refractiva.
Generalmente estas alteraciones visuales causan cierta incomodidad, y a medida que se van agravando pueden generar pérdida de visión. Por ello, es recomendable que la persona mayor sea asistida por un oftalmólogo para conseguir un diagnóstico exacto.