Entrevista a Agustín Lopesino,
director corporativo de Sector Público y Servicios de Atención en el Domicilio de DomusVi
Un reciente estudio de la Consejería de Derechos Sociales y Bienestar revela que el 75,3% de las personas de entre 55 y 75 años prefiere envejecer en sus hogares que trasladarse a una residencia. Esta realidad plantea unos servicios en el entorno domiciliario que se complementen con los de los centros residenciales, dando ambos respuesta a situaciones y momentos determinados de las personas, a su entorno y al desarrollo de su proyecto vital.
En la siguiente entrevista, Agustín Lopesino, director corporativo de Sector Público y Servicios de Atención en el Domicilio de DomusVi, nos comenta el presente y futuro de los Servicios de Atención en el Domicilio.
¿Cuál diría que es la principal misión de los servicios de atención domiciliaria para personas mayores y dependientes?
Nuestra misión es armonizar el deseo de envejecer en el propio hogar de las personas, brindándoles una calidad asistencial de primer orden, comparable a los cuidados que reciben las personas atendidas en centros residenciales. Pero es importante que estos cuidados sean prestados por profesionales cualificados y debidamente formados, y no ser responsabilidad única de las familias o fundamentarse en el voluntariado o las redes de posibles apoyos provenientes del entorno.
Cada persona debe tener la capacidad de elegir sus cuidados y el proveedor de éstos. Y eso vale tanto en el ámbito de las residencias como en el de los servicios domiciliarios. Estamos aquí para ofrecer los mejores cuidados a la medida del usuario. Esa es nuestra misión y razón de ser.
¿Qué papel juega la colaboración público-privada en el desarrollo y funcionamiento de estos servicios?
Es indispensable que todos los actores dialoguemos a fondo y de forma continuada. Asimismo, creemos que deberían garantizarse, por parte de la Administración General del Estado y de las Comunidades Autónomas, los medios económicos y la estructura funcional necesaria para que estos servicios de calidad y a la medida de las necesidades de cada usuario sean una realidad.
Es un proceso que debe llevarse a cabo paulatinamente, sin provocar graves desequilibrios laborales o económicos. Necesitamos ejes bien definidos y mecanismos de colaboración público-privada que velen por los resultados alcanzados en los objetivos establecidos para la persona dependiente.
¿Podemos decir que estamos en un momento de transformación profunda de los servicios de atención en el entorno domiciliario?
¡Desde luego! Los cuidados en el domicilio exigen un proceso de transformación profunda y sin demora. Por ejemplo, en este proceso de reconversión para garantizar la máxima adecuación a los deseos y preferencias de las personas atendidas, se requieren estructuras más flexibles que las actuales con procesos de licitación que garanticen la prestación de un servicio adecuado. Asimismo, se deben armonizar los derechos de las personas dependientes con los de las personas trabajadoras que las cuidan y, a la vez, con los procesos de provisión de los servicios. Y éste es un aspecto que debemos abordar con decisión.
El método más habitual para la provisión de servicios públicos en el entorno domiciliario es la licitación pública…
Sí, y aquí urge diálogo y trabajo, así como abordar las iniciativas legislativas pertinentes para conseguir adaptar y actualizar los precios según los condicionantes económicos de los últimos años, con el consiguiente impacto en la actualización de los salarios de los trabajadores. Quienes hemos conocido en primera persona la situación del sector a finales de los años 90 y principios de la década del 2000, sabemos qué pasos hay que evitar dar para prevenir quiebras en entidades por la imposibilidad de asumir la gestión de los servicios. Aprendamos de aquellas situaciones para ir a mejor.
Habla de crecimiento de estos servicios por parte de DomusVi, durante este año. ¿Puede aportar cifras?
Por supuesto, estimamos que la atención de nuestro servicio SAD crecerá en torno a un 6% y que nuestra área de Healthcare lo hará en la misma línea. En cuanto a nuestro servicio de Teleasistencia (TAD), la previsión es duplicar el número de usuarios atendidos el pasado año, de manera que daremos servicio a unos 80.000 usuarios. Ahora mismo sumamos 30 oficinas de atención en el entorno domiciliario, totalizando un equipo de 11.000 profesionales.
