Un artículo de Libertad Pérez,
Pedagoga especializada en Atención Domiciliaria y Social Leader en Familiados

En España hay 8 millones de personas que necesitan ser cuidadas, de ellas 6 millones necesitan ayuda en su vida cotidiana. Cuando nos encontramos en una situación de dependencia recurrimos a algunos de los recursos existentes: Residencias, Centros de Día o Atención Domiciliaria.

Tradicionalmente, cuando pensamos en un cuidado profesional y de mayor calidad, pensamos en un Centro, dejando el papel más informal y menos profesional a la Atención Domiciliaria. Por lo tanto, el personal que se dedica a la Atención Domiciliaria se ha quedado en un segundo plano. Teniendo peores condiciones laborales y con un menor reconocimiento por parte de nuestra sociedad.

A esta realidad, tampoco ayuda que en el 2017 la Ley de Dependencia no contemplase la Atención Domiciliaria, prestando atención en exclusiva a los Centros reglados, fomentando que los cuidados en el hogar se sigan sin profesionalizar.

Sin embargo, la realidad es que la sociedad está cambiando y la percepción sobre los cuidados también. En este sentido, cada vez son más las personas que prefieren ser atendidas en su domicilio, dejando para un momento de mayor dependencia el hacerlo en un centro. A esto se le añade que nos hemos vuelto más exigentes y pedimos un servicio de mayor calidad y que se adapte a cada persona.

Si escuchamos a la sociedad, las empresas del sector y las entidades gubernamentales, deberíamos trabajar en esa dirección, haciendo todo lo posible para equiparar la formación, la experiencia, las condiciones laborales, las ayudas a las familias, los recursos… para que el cuidado sea de calidad y se centre en la persona, independientemente del contexto en el que se dé.

Para poder conseguir esta meta deberíamos trabajar en conjunto y contar con todos los recursos existentes, entre los que sin duda se encuentran las empresas tecnológicas del sector de los cuidados que desde hace años trabajan para visibilizar estos cuidados. A su vez, su tecnología ayuda a dar soluciones más flexibles y más inclusivas. En las que los usuarios son los protagonistas y los que eligen qué tipo de cuidado quieren recibir.

En definitiva, todos los cuidados son necesarios y cada persona puede elegir como debe ser cuidada. Nosotros como empresas del sector “solo” tenemos la obligación de poner a disposición de cada persona todas las herramientas posibles para tener una vida de calidad.

Libertad Pérez
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