L’Associació Catalana de Recursos Assistencials (ACRA) considera «muy positiva» la retirada de la obligatoriedad de la mascarilla en las residencias de personas mayores, entre otros recursos asistenciales, una noticia largamente esperada por el sector y muy reivindicada por ACRA ante las administraciones.

La medida, que entrará en vigor cuando se publique en el BOE, muy probablemente a partir de mañana, beneficiará a profesionales y familiares de las personas usuarias, que ya estaban exentas de llevar la mascarilla.

geriatricarea mascarilla
La obligatoriedad de llevar la mascarilla a las residencias era una anomalía en el contexto europeo

“Estamos muy contentos, pero más que por el anuncio en sí, por el hecho de volver a hablar cara a cara con las personas mayores que cuidamos, sin la mascarilla de por medio”, explica Cinta Pascual, presidenta de ACRA.

En su opinión, “la mascarilla implicaba un impedimento para la comunicación, no trabajábamos a gusto”, una realidad que había sido el día a día de los centros desde mayo de 2020, cuando en plena primera ola de la pandemia se reguló la obligatoriedad de la mascarilla en todos los ámbitos de la vida pública.

Hoy en día, la realidad es completamente distinta, apuntan desde ACRA, y las residencias y otros recursos asistenciales de personas mayores en situación de dependencia viven con plena normalidad. De hecho, la obligatoriedad de llevar la mascarilla a las residencias era una anomalía en el contexto europeo, puesto que prácticamente todos los países de la Unión Europea, excepto Italia y Grecia, ya habían eliminado la mascarilla como requisito indispensable en las residencias.