Un artículo de Atenzia
Telemedicina, telesalud, telemonitorización. Tres conceptos diferentes, aunque a menudo confundidos, con un objetivo común: una atención en remoto de calidad para mejorar la salud y bienestar de los pacientes. Y para conseguirlo, los relojes de teleasistencia se han posicionado como la mejor solución en el mercado.
En los últimos años hemos vivido una verdadera revolución tecnológica. Nuestra rutina, nuestros hábitos e incluso nuestros hobbies se han visto modificados o adaptados con la aparición de nuevas plataformas, herramientas y soluciones. La forma de consumir cultura, comprar, consultar dudas e incluso comunicarnos han cambiado.
Una transformación global que ha salpicado, como no podía ser de otra manera, también al sector de la salud. Desde la digitalización de los registros médicos hasta la creación de dispositivos médicos avanzados, la tecnología ha permitido mejorar la eficiencia, la calidad y la accesibilidad de los servicios de salud.
Todos estos cambios han venido en paralelo a la aparición de nuevas herramientas. El teléfono móvil se ha convertido, por sí solo, en el gran protagonista del siglo XXI. Un dispositivo que se ha ido adaptando para ofrecer todo tipo de funcionalidades en cualquier momento y desde cualquier lugar, pero no ha venido solo. Los wearables, aparatos electrónicos pensados para llevar encima, se han convertido en el complemento perfecto.
En este amplio universo destacan los smartwatches, que van mucho más allá de los relojes tradicionales y entre los que destacan los relojes de teleasistencia, la última innovación sociosanitaria para mejorar la calidad de vida y bienestar de las personas.
Transformación digital humanizada, inclusiva y accesible
La tecnología ha venido para quedarse. Una afirmación tan obvia como tranquilizadora que sin embargo sigue generando sentimientos encontrados en la población, especialmente en el sector sociosanitario. ¿A qué se debe este escepticismo?, ¿estamos preparados para una verdadera transformación digital en el ámbito de la salud?
La celeridad con la que avanza la tecnología nos resulta, en muchas ocasiones, abrumadora. Los nativos digitales han interiorizado fácilmente gestos y procesos que a aquellos que han nacido previamente a la era digital, les resulta complicado adoptar. Esto ha creado una brecha generacional, ya que este tipo de innovaciones parecían no estar pensadas para los seniors, cuya curva de aprendizaje en este tipo de procedimientos es mucho mayor.
Pero los avances tecnológicos no son tal sino engloban a la totalidad de la población. Por eso, además de facilitar el acceso y mejorar las conexiones es necesario desarrollar soluciones adaptadas a todas las personas. Porque la democratización tecnológica es la única forma de que esta sea realmente útil.
En este sentido la innovación sociosanitaria ha ido avanzando en los últimos años para desarrollar herramientas cada vez más precisas y sofisticadas, pero también más accesibles. También en el ámbito de la teleasistencia se ha trabajado en este sentido con resultados prometedores como los ya mencionados relojes de teleasistencia.
Relojes de teleasistencia: la tranquilidad en tu mano
Pero, ¿qué diferencia a un reloj inteligente al uso de los relojes de teleasistencia? La complejidad de los smartwatches los convierte en dispositivos que requieren de ciertos conocimientos tecnológicos para poder usarlos mientras que, en el caso de los segundos, su uso es muy sencillo e incluye botones e instrucciones grandes y claras.
Sin embargo, la diferencia principal reside en sus funcionalidades. Además de poder recibir y hacer llamadas, medir datos de salud o leer mensajes, entre otros, los relojes de teleasistencia incluyen especificaciones dirigidas a ofrecer asistencia inmediata en caso de emergencia.
Así, el botón SOS, la geolocalización y el detector de caídas facilitan la respuesta ante situaciones en las que el usuario se encuentre en peligro. A esto se suma una atención 24 horas para que este tipo de reloj sea el complemento perfecto para pasear o disfrutar de tiempo al aire libre con tranquilidad y sin necesidad de llevar el móvil encima.
El auge de este tipo de dispositivos ha ampliado las alternativas en el mercado y por eso es importante conocerlos a fondo. Y es que al igual que existen grandes diferencias entre teleasistencia y aviso a familiares, también en este tipo de aparatos hay disparidad en las funcionalidades y el servicio prestado. Así, por ejemplo, Senzia es el único reloj con teleasistencia certificada.
En definitiva, la tecnología sigue siendo una herramienta crucial para mejorar el sector de la salud. La innovación tecnológica puede ayudar a abordar algunos de los mayores desafíos del sistema de salud actual, como el envejecimiento de la población, el aumento de enfermedades crónicas y el acceso limitado a servicios de salud en áreas remotas o desfavorecidas.
Pero debemos de seguir trabajando en su humanización y democratización y apostar en firme por la innovación sociosanitaria. Porque si en este proceso no tenemos en cuenta todos los ámbitos y a toda la población, no habremos avanzado nada. Por ello productos innovadores como los relojes de teleasistencia son un triunfo y el verdadero futuro no solo de los cuidados, sino de la sociedad en su conjunto.