La Red de Atención a las Adicciones (UNAD) ha lanzado una campaña para concienciar sobre el impacto de las adicciones en las personas mayores, en la que se recalca la importancia de desarrollar recursos específicos para este colectivo. Y es que los consumos pueden mantenerse o incluso iniciarse independientemente de la edad de las personas.

La Red de Atención a las Adicciones (UNAD) ha lanzado una nueva campaña con el objetivo de concienciar sobre el impacto de las drogodependencias y otras adicciones en las personas mayores. Esta iniciativa busca mejorar la prevención y el cuidado de este grupo de población, resaltando la necesidad de desarrollar recursos específicos.

El presidente de UNAD, Luciano Poyato, destaca que «cuando hablamos de mayores y adicciones es importante poner el foco en normalizar que la población envejece y esto no significa necesariamente que determinados consumos desaparezcan de la vida de las personas por cumplir años. De hecho, los consumos pueden mantenerse o incluso iniciarse independientemente de la edad de las personas».

La campaña, titulada «La adicción no tiene edad», ha sido financiada por la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas y estará disponible en redes sociales a finales del mes de julio.

Geriatricarea- adicciones en personas mayores
Los consumos problemáticos pueden iniciarse, agravarse o mantenerse con la edad y pueden ser invisibles, incluso por el entorno más cercano

El spot de la campaña se basa en los datos obtenidos en el estudio «Personas mayores y adicciones: un diagnóstico de LARES y UNAD, con perspectiva de género», según el cual, el 56% de las personas mayores reconoce haber consumido fármacos como ansiolíticos y/o antidepresivos en el último año. Este grupo tiene una edad promedio de 78 años, siendo el 64% mujeres. Además, destaca que este consumo de sustancias está asociado a una baja percepción del riesgo de conductas adictivas.

En relación al consumo de alcohol y/o tabaco en los últimos 12 meses, el estudio revela que el 52% de las personas encuestadas lo ha realizado, cifra que disminuye al 44,8% en el caso de las mujeres. Respecto a las sustancias ilegales, el 9,8% ha consumido alguna o varias de ellas en el último año.

Por otro lado, se observa que el 42% ha participado en juegos de azar o apuestas en el último año, cifra que asciende al 52,6% en el caso de las mujeres y se mantiene en el 47,4% en hombres.

Soledad, estigma y falta de apoyo

La campaña de UNAD busca poner de relieve que estos consumos problemáticos, que pueden iniciarse, agravarse o mantenerse con la edad, a menudo se vuelven invisibles incluso para las personas cercanas, que niegan la existencia de un verdadero problema de adicción. Además, si consideramos la soledad, el estigma y la falta de apoyo que enfrentan estas personas, la atención se vuelve aún más difícil.

En este sentido, UNAD enfatiza que, dado el aumento de la esperanza de vida, también aumenta la supervivencia de las personas mayores que han experimentado o experimentan adicciones. Estas personas necesitarán recursos específicos y profesionales preparados y conscientes de trabajar con una población mayor con algún tipo de adicción.

Por todo ello, el presidente de UNAD hace un llamamiento a las administraciones públicas para solicitar su compromiso y responsabilidad en la atención interdisciplinaria a estas personas, con un enfoque en la prevención. Y es que, como señala el spot de la campaña, «la adicción no tiene edad, pero siempre tiene alternativa».