Las piedras en el riñón son más frecuentes en verano, por lo que es importante mantener una adecuada hidratación para evitar o eliminar los cálculos renales. Si no es posible acabar con ellos de forma natural, el equipo de Urología de Quirónsalud Málaga propone la litotricia como tratamiento principal y mínimamente invasivo sin cirugía.
Durante el verano, el cálculo o litiasis renal, más conocido como piedras en el riñón, puede llegar a aumentar hasta en un 40%, según los expertos. La razón es muy sencilla: los cálculos renales más frecuentes se producen por una acumulación de calcio, otros minerales y sales en el riñón o la vía urinaria.
En este sentido, el doctor José Ángel Gómez Pascual, jefe del Servicio de Urología del Hospital Quirónsalud Málaga, advierte que «a medida que aumenta la temperatura, sudamos más, lo que conduce a la pérdida de líquidos del cuerpo, a una mayor concentración de las mencionadas sustancias y, por tanto, aumenta el riesgo de cálculos renales«.
La principal recomendación es igual de sencilla que la explicación de la causa: la solución está en la hidratación. La mayor pérdida de líquido debe compensarse con la ingesta de agua, algo fundamental para eliminar toda sustancia a través de la orina, también en el caso de formación de piedras.
El doctor Gómez Pascual recomienda beber abundante agua, pero también otro tipo de líquidos, como sopas, infusiones o zumos. La prevención a través de la hidratación es lo más importante, y no sólo en verano, aunque por motivos obvios relacionados con la temperatura, esta problemática sea más habitual en época estival. La insuficiente hidratación es causa común a todo tipo de piedras o cálculos urinarios, entre las que destacan, además de las piedras cálcicas, las de ácido úrico y las piedras provocadas por infecciones.
Las piedras en el riñón pueden variar de tamaño, desde la medida de un grano de arena hasta una piedra de proporciones considerables. Los cálculos renales se pueden expulsar del cuerpo de manera natural a través de la orina, gracias a recomendaciones sencillas como la anteriormente comentada de la ingesta abundante de agua.
No obstante, también pueden permanecer en el riñón o bien desplazarse por el tracto urinario y quedarse atascados, bloqueando las vías urinarias y causando el doloroso cólico nefríticol. La manifestación sintomática más frecuente de piedras renales: un dolor brusco, repentino e intenso. Otras veces, se pueden detectar los cálculos renales de forma casual mediante pruebas radiológicas o a partir de una sepsis urinaria; una infección que cursa dolor, malestar general y fiebre.
En los casos en los que no se auto eliminan los cálculos renales a través de la orina, existen técnicas especializadas en Urología para destruirlos. Para el Servicio de Urología del Hospital Quirónsalud Málaga, la litotricia extracorpórea por ondas de choque (LEOC) es la elección preferente para resolver cálculos renales o ureterales, al eliminar las piedras en el riñón de forma mínimamente invasiva evitando la cirugía y la anestesia general.
«Se realizan los tratamientos sin hospitalización, con analgesia o sedación profunda para evitar dolor y problemas de anestesia, en régimen de Hospital de Día y el alta se produce una o dos horas después de finalizado el tratamiento, si la situación clínica lo permite y con la condición de que el paciente sea conducido a su domicilio por un acompañante», detalla el jefe del Servicio de Urología del Hospital Quirónsalud Málaga.