INIMA Rehabilitación, empresa de origen español especializada en fisioterapia y terapias de neurorehabilitación a domicilio para enfermos crónicos, eventuales y geriátricos, expandirá sus unidades, tanto en España como internacionalmente, bajo el sistema de franquicia.

Tal y como destaca Mariona León, CEO & Fundadora de INIMA Rehabilitación, esta compañía “está formada por un equipo de profesionales que lleva años dedicado a la neurorehabilitación de adultos cuando más lo necesitan”. “Poder trasladar nuestra experiencia y crear unidades INIMA para dar asistencia a domicilio a personas con diferentes discapacidades, es un proyecto que nos llena de ilusión. Queremos que nuestra marca crezca con franquiciados que adopten nuestro compromiso con el profesionalismo, el cuidado y el respeto por los pacientes y sus familias”.

Inima Rehabilitación cuenta también con un equipo de trabajo social y apoyo que realizan las solicitudes e información sobre diversas ayudas económicas necesarias en cada momento, tales como:

• solicitud de valoración de dependencia
• revisión de dependencia
• valoración de invalidez
• valoración de incapacidad

El franquiciado de INIMA Rehabilitación no necesita local y el total de su inversión es de 20.500 euros.

Como señalan desde esta compañía, la neurorehabilitación tiene como objetivo restaurar el movimiento perdido, prevenir complicaciones, mantener o mejorar la movilidad articular, tratar posibles cambios sensoriales, prevenir limitaciones musculares, mantener la función física y frenar el proceso de desarrollo de enfermedades degenerativas.

INIMA Rehabilitación, antes de iniciar tratamientos de neurorehabilitación a domicilio, realiza una valoración inicial multidisciplinar, en la que se recomienda qué intervención es la más adecuada, de acuerdo a las necesidades individuales, explicando los beneficios de cada disciplina.

Aplicar terapias como fisioterapia, terapia ocupacional, logopedia y estimulación cognitiva a domicilio suponen para el paciente una serie de ventajas importantes:

• Comodidad, lo que resulta especialmente beneficioso para personas con movilidad limitada o discapacidades,
• Personalización, tratamiento más individualizado y centrado en el paciente.
• Ahorro de tiempo y dinero, los pacientes ya no necesitan acudir a un centro de rehabilitación, ahorrando tiempo y dinero.
• Mejora del bienestar emocional, la neurorrehabilitación domiciliaria puede ayudar a los pacientes a sentirse más cómodos y seguros y mejorar su salud mental.