Implementar unas sencillas medidas de prevención y protección podrían evitar muchas de las muertes provocadas por los incendios. A fecha 10 de marzo se habían registrado ya en nuestro país 47 fallecimientos por incendio, muchas personas mayores de 65 años.
Y es que las personas de edad avanzada es la población más vulnerable ante los incendios domésticos, siendo las causas más comunes las sobrecargas de enchufes, una red eléctrica deteriorada, las baterías recargando no vigiladas, y los calefactores. Es en invierno y en el horario nocturno cuando se producen más víctimas.
Conscientes de que se puede reducir el número de muertes por incendios, desde TECNIFUEGO, Asociación Española de Sociedades de Protección contra Incendio, recomienda unas sencillas medidas de prevención y protección para evitar tantas muertes provocadas por los incendios.
En primer lugar, desde esta Asociación se solicita la modificación de la legislación en España para que se obligue a instalar detectores de incendios en todas las viviendas, tanto en el parque nuevo como en el antiguo (en estos momentos se está trabajando en una norma para exigir detectores en las casas de nueva construcción). La alarma de un detector puede evitar muertes, alertando de un incendio y posibilitando la evacuación.
Es recomendable igualmente la revisión y actualización de la red eléctrica, ahora más que nunca debido a una mayor carga eléctrica en la vida diaria: más aparatos conectados, más regletas en los espacios pequeños, más equipos electrónicos que utilizan baterías, como juguetes o teléfonos móviles y los dispositivos de movilidad como patinetes, bicicletas o sillas de ruedas. Estos nuevos equipamientos entrañan nuevos riesgos que deben ser trasladados al Código Técnico de la Edificación (CTE) para que incluya mayores medidas de seguridad en viviendas.
Según el criterio experto de TECNIFUEGO y los estudios realizados hasta la fecha, las soluciones que podrían evitar muertes por incendio son:
- Legislar a favor de instalar protección contra incendios en el interior de las viviendas, como son detectores y alarmas de incendio. Existe regulación en países de nuestro entorno (Inglaterra, Francia, Países Bajos…). En España se ha constituido un grupo de trabajo en UNE para desarrollar una norma de aplicación para detección en vivienda, que esperamos sea el primer paso para su inclusión en el CTE.
- Implementar medios técnicos para lograr la protección. El planteamiento tiene que ser integral, contemplando las medidas de protección activa (extintores, detectores, rociadores, BIE, etc.) y las de protección pasiva (resistencia al fuego de los materiales constructivos, reacción al fuego de estos materiales y del mobiliario y decoración; vías de evacuación y salidas de emergencia, etc.).
- Se debe informar de estas medidas de protección a los ciudadanos, realizando campañas divulgativas en los medios, entre los presidentes de las comunidades de vecinos y los administradores de fincas; y a través de los servicios de teleasistencia.
- La concienciación y la formación son imprescindibles. Hay que saber cómo protegerse, y cómo actuar en caso de incendio.
- A través de las aseguradoras también puede reclamarse una mayor protección, condicionando la póliza del seguro del hogar según la instalación de equipos de protección contra incendios.
- Los sistemas de protección contra incendios una vez instalados deben ser mantenidos, para que se conserven en perfecto estado.
Incidiendo en estas medidas, y como apoyo a la concienciación, desde TECNIFUEGO se ha puesto en marcha “Víctimas Cero”, una campaña informativa sobre el riesgo de incendio para divulgar soluciones (equipos y sistemas de seguridad), y cambios legislativos que aporten protección en las viviendas.
Con esta iniciativa se dirige el foco hacia las vulnerabilidades para dar respuesta a las coincidencias detectadas. Concienciación, cambios legislativos, instalación de medidas básicas de seguridad contra incendios, formación y comportamientos adecuados frente al fuego son la base por la que empezar a construir un futuro sin muertes, con el objetivo “Víctimas Cero” por incendio.