La IX Jornada de Atención Centrada en la Persona de ACRA abordó la diversidad en el envejecimiento con más de 300 asistentes. Se debatieron entre otras cuestiones, el impacto de la tecnología en la mejora de la atención a personas mayores, la demografía del envejecimiento en Cataluña y la importancia de la ética en los servicios sociales.

La IX Edición de la jornada en Atención Centrada en la Persona de ACRA, centrada en esta ocasión en la diversidad en el envejecimiento, congregó a más de 300 asistentes. Tres ponencias sobre demografía, tecnología y ética se han complementado con otras experiencias muy diversas en el Cosmocaixa de Barcelona.

Durante su intervención, Cinta Pascual, presidenta de ACRA, destacó como el uso de la tecnología mejora la atención a las personas mayores, manteniéndolas en el centro de los procesos asistenciales, declarando que “la tecnología no puede desplazar a los profesionales, pero es imprescindible si queremos dar un servicio de más calidad”. Por su parte, Albert Esteve, director del CED e Investigador del Departamento de Sociología de la Universidad de Barcelona, abordó la demografía y sobre envejecimiento en Cataluña, una de las sociedades más longevas del mundo.

El primer bloque de experiencias reunió cuatro propuestas alternativas a la institucionalización de entidades no asociadas:

• un proyecto de reunificación familiar para vivir la vejez
• la creación de un espacio urbano con personas mayores de una residencia
• viviendas con servicios en el País Vasco
• a primera vivienda cooperativa sénior de Barcelona

En el segundo bloque, cinco socios mostraron sus difrentes enfoques hacia la atención hacia las personas dependientes, pero siempre bajo el denominador común de la ACP: la tecnología en el SAD, viviendas con servicios e intensidad en el SAD, apartamentos seniors conectados, un proyecto intergeneracional entre una residencia, un centro de día y una escuela, y el abordaje del reemplazo generacional de los equipos de profesionales.

Begoña Román, doctora en filosofía y Presidenta del Comité de Ética de Servicios Sociales de Cataluña, abogó por la búsqueda de excelencia en la atención a las personas mayores mediante la ética, de dar una buena atención desde la personalización a las personas usuarias y a las familias para tener un envejecimiento “con sentido” y no solo “consentido”.

La presidenta de ACRA cerró la jornada pidiendo unidad, activismo, profesionalidad, vocación, personalización y un plataforma de servicios para dar la mejor atención a personas con necesidades y exigencias cada vez más diferentes.