El estudio IRENE subraya la eficacia de los suplementos nutricionales orales en la recuperación de ancianos con fractura de cadera. Esto es especialmente relevante teniendo en cuenta que para el año 2034 se espera un aumento significativo en las fracturas por fragilidad en España.
Para el año 2034 se prevé un aumento del 30% en las fracturas por fragilidad, alcanzando un total estimado de 370.000 fracturas en España. En este contexto, la población mayor con fractura de cadera espontánea emerge como un grupo altamente vulnerable, con un 50% de ellos en riesgo de desnutrición y un 30% ya desnutridos previamente al ingreso.
En el marco del 39ª Congreso Nacional de la Sociedad Española de Nutrición Parenteral y Enteral (SENPE), se celebró un simposio sobre el tratamiento nutricional del paciente con fractura de cadera. El simposio, patrocinado por Laboratorios Ordesa, puso el foco en la eficacia de un suplemento nutricional oral en la recuperación de pacientes frágiles con fractura de cadera.
El Dr. Pedro Pablo García Luna, médico especialista en endocrinología y nutrición del Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla y presidente de la Sociedad Andaluza de Nutrición Clínica y Dietética (SANCYD), destacó que el estudio IRENE “es el primero que se realiza para comprobar los resultados de una suplementación nutricional oral en pacientes con fractura de cadera” y señaló que es “crucial aumentar nuestra conciencia sobre la conexión entre la malnutrición y el riesgo de fracturas”.
Los resultados del estudio IRENE reflejan que la intervención con suplementos nutricionalrd orales demostró mejoras significativas en la nutrición y la recuperación muscular en ancianos desnutridos operados de fractura de cadera. Además, la suplementación en pacientes hospitalizados con fractura de cadera podría disminuir el riesgo de complicaciones.
El Dr. José Manuel García Almeida, jefe de servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Quirónsalud de Málaga y responsable de la unidad de Nutrición en el Hospital Virgen de la Victoria de Málaga, explicó que “el paciente que tomó el suplemento mostraba más posibilidades de recuperación en cuanto a fuerza, masa muscular y la función general”.
“Esto demuestra que es importante cuando se habla de desnutrición, no sólo considerar si el paciente recupera peso o los valores de la analítica, sino evaluar los cambios de composición corporal con bioimpedancia (ángulo de fase), ecografía y test funcional”, recalcó este experto.
Por su parte, los pacientes que mostraban desnutrición severa mostraron una respuesta muscular menos favorable, subrayando la importancia de una intervención nutricional temprana y de mayor intensidad en estos casos. Como hizo hincapié el Dr. García Luna “debemos tratar la desnutrición antes de que sucedan eventos como una fractura de cadera y que cuando sucede la suplementación oral debe ser mandatorio, incluso en personas que no están en ese momento malnutridas”.
A raíz de los datos aportados por este estudio, el Dr. García Almeida, señaló que los profesionales sanitarios como “traumatólogos, médicos de medicina interna, rehabilitadores, enfermeras, especialistas en endocrinología y nutrición, fisioterapeutas, deben de estar muy pendientes del riesgo de desnutrición, que a veces no se ve simplemente por el peso, sino que hay que valorar también la falta de masa muscular o la función en general”.