Un artículo de Iván García, coordinador de Enfermería de los centros de día STIMA Mayores

La enfermería geriátrica resulta esencial en la atención integral de las personas mayores, más aún conforme la población envejece. Esta disciplina no solo se enfoca en el cuidado básico, sino que también aborda de manera holística las necesidades físicas, cognitivas y emocionales de los ancianos, promoviendo su autonomía y calidad de vida.

Geriatricarea enfermería geriátrica
La intervención de una enfermera en la gestión de los cuidados de salud mejora significativamente la calidad de vida de los pacientes

En los centros de día STIMA Mayores, esta especialidad se ha consolidado como un pilar fundamental para garantizar un envejecimiento activo, digno y saludable, aplicando la metodología ‘STIMA Sfera’ que integra estos cuidados de manera efectiva y personalizada.

El núcleo de la enfermería geriátrica es el cuidado, un principio fundamental de esta profesión. Su formación específica les permite, además, realizar evaluaciones geriátricas integrales, creando planes de cuidados personalizados para cada persona. De esta manera, pueden cubrir todas las necesidades de los pacientes, garantizando una atención enfocada en el bienestar del individuo.

Hablamos de una auténtica vocación por atender y ayudar a las personas mayores a mantener una calidad de vida óptima, fomentando su autonomía y autocuidado. Este enfoque integral es esencial para ofrecer una atención centrada en la persona, adaptada a cada individuo, ya sea en nuestros Centros de Día o en su propio domicilio.

Gestión de la salud y de los recursos

Su actividad, sin duda, resulta de gran eficacia a la hora de cuidar a las personas mayores ya sea en un centro de día, residencia o en su propio domicilio. Varios estudios han demostrado que la intervención de una enfermera en la gestión de los cuidados de salud mejora significativamente la calidad de vida de los pacientes.

Por ejemplo, el estudio Effectiveness of Nursing Process Use in Primary Careha evidenciado que la calidad de vida de los pacientes mejora notablemente cuando los cuidados están gestionados por profesionales de enfermería.

En el caso de los mayores, la figura de la enfermera geriátrica se vuelve aún más crucial debido a la complejidad y especificidad de sus necesidades. La capacidad para realizar valoraciones continuas y personalizadas permite detectar problemas de manera temprana y aplicar las intervenciones necesarias para prevenir complicaciones.

Por otro lado, una de las principales contribuciones de las enfermeras geriátricas es su capacidad para gestionar recursos de manera eficiente. Al conocer las necesidades individuales de cada usuario, pueden asignar los recursos humanos y materiales necesarios para garantizar cuidados de alta calidad.

En el ámbito domiciliario, esta figura es fundamental para coordinar los apoyos de la atención, asegurando que cada persona reciba la asistencia adecuada en su hogar. Una gestión que optimiza el uso de recursos, y mejora significativamente la calidad de vida de las personas mayores.

Integradas en el modelo STIMA Sfera

En los centros de día STIMA Mayores, la metodología ‘STIMA Sfera’ se ha consolidado como un modelo de atención holístico y personalizado que integra la enfermería geriátrica de manera fundamental. Este enfoque multidisciplinar también incluye especialistas en geriatría, médicos de familia, fisioterapeutas, neuropsicólogos, terapeutas ocupacionales y trabajadores sociales.

La enfermera geriátrica se encarga de supervisar diariamente la salud de los usuarios, administrando medicación, controlando constantes vitales y atendiendo cualquier malestar. Este trabajo minucioso y constante es fundamental para garantizar una atención de calidad y personalizada.

Según los datos del último año, esta metodología propia ha mostrado resultados notables. El 97,4 % de los usuarios aseguraron estar satisfechos con el servicio y la estimulación integral recibida en nuestros centros de día.

Por otro lado, el  91 % de los familiares también compartieron esa satisfacción. Además, el 71 % de los objetivos planteados para los usuarios se alcanzaron, lo que refleja la efectividad de los programas de rehabilitación y estimulación integral implementados.

Equipos multidisciplinares

Estos resultados también subrayan la importancia de un enfoque holístico, donde la enfermería geriátrica juega un papel principal. Estos profesionales, con su capacidad de gestión y su enfoque integral, son figuras clave en este modelo que considera a la persona mayor en su totalidad, abarcando todos los aspectos de su bienestar. Una labor que realizan en estrecha colaboración con el resto de profesionales para coordinar y controlar la estimulación integral precisa de cada usuario.

En un contexto donde el envejecimiento de la población es una realidad creciente, la especialización en enfermería geriátrica y modelos de atención como ‘STIMA Sfera’ se presentan como referentes para asegurar un envejecimiento activo, digno y saludable. La vocación, el conocimiento y la capacidad de gestión de las enfermeras geriátricas son esenciales para hacer frente a los desafíos actuales y futuros en el cuidado de las personas mayores.