geriatricarea Noelia Llera albi

Un artículo de Noelia Llera,
Directora de marketing, desarrollo de negocio y plataforma técnica de Albi

A medida que envejecemos, mantener la salud cerebral se vuelve una prioridad. Muchas personas mayores desarrollan enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer o el Parkinson, pero ¿sabías que la alimentación puede ayudar a prevenir o ralentizar estas condiciones?

La ciencia ha demostrado que ciertos alimentos tienen propiedades protectoras para el cerebro, y en Albi, nos aseguramos de que nuestros clientes en residencias disfruten de platos que promuevan su salud cognitiva.

geriatricarea Alimentacion enfermedades neurodegenerativas
La alimentación puede ayudar a prevenir o ralentizar el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas como Alzheimer o Parkinson

Alimentos que cuidan tu cerebro

  • Pescado azul (salmón, sardinas)
    Rico en ácidos grasos omega-3, estos alimentos son esenciales para la salud de las neuronas. Comer pescado azul ayuda a reducir el riesgo de Alzheimer y a mantener el cerebro en óptimas condiciones.
  • Frutos rojos (arándanos, fresas)
    Cargados de antioxidantes, los frutos rojos protegen al cerebro del daño oxidativo. Incluir estos alimentos en la dieta diaria puede mejorar la memoria y la capacidad de aprendizaje en las personas mayores.
  • Verduras de hoja verde (espinacas, brócoli)
    Son una excelente fuente de vitaminas del grupo B, que ayudan a mantener la función cognitiva y reducen el riesgo de deterioro mental.
  • Chocolate negro
    El cacao estimula la memoria y promueve la circulación sanguínea en el cerebro. En Albi, ofrecemos postres con chocolate negro para que nuestros clientes disfruten de sus beneficios con un toque delicioso.
  • Cúrcuma y especias
    La cúrcuma, con su componente activo llamado curcumina, tiene efectos antiinflamatorios que protegen al cerebro. Nuestros guisos y sopas la incluyen para dar sabor y salud a la vez.

Cuidando la mente a través de la comida

En Albi nos inspiramos en la dieta mediterránea y elaboramos menús equilibrados que incluyen frutas, verduras, legumbres y aceite de oliva. Este tipo de alimentación se ha asociado con un menor riesgo de enfermedades neurodegenerativas.

Además, evitamos el uso de azúcares y grasas saturadas que pueden afectar la salud cerebral, y mantenemos una hidratación adecuada en todo momento.

¡Cada detalle cuenta cuando se trata de cuidar la mente y el cuerpo!