El proyecto Pharaon (Pilots for Healthy and Active Ageing), una iniciativa internacional que surge en 2019, con el objetivo de promover el envejecimiento activo y saludable, ha generando un catálogo único de tecnología y servicios, fruto de los seis programas pilotos desarrollados en Italia, Portugal, Países Bajos, Eslovenia y España.

Liderado por la Scuola Superiore di Studi Universitari e di Perfezionamento Sant’Anna de Pisa (Italia), Pharaon ha contado con una inversión de 21 millones de euros, financiados por el programa Horizonte 2020 de la Unión Europea, y ha contado con la participación de un total de 41 entidades de 12 países (entre ellas Ageing Lab, Diputación de Jaén, Universidad de Jaén y Minsait), 1.880 personas mayores y 997 profesionales.

A nivel nacional, el piloto andaluz ha estado constituido por un consorcio liderado por la Fundación Ageing Lab, y del que también ha formado parte Diputación de Jaén, que se ha encargado de la selección de los perfiles de las personas usuarias, así como del desarrollo del piloto en entornos reales; la Universidad de Jaén, que ha prevalidado la tecnología en varios municipios de la provincia y desarrollado el protocolo de formación y Minsait, de la empresa Indra, proveedora de la plataforma tecnológica donde se integraron los dispositivos.

Mejora la accesibilidad de la tecnología para las personas mayores

Uno de los principales objetivos del proyecto ha sido promover la accesibilidad de la tecnología para las personas mayores, facilitando su integración en una plataforma única e interoperable. Para lograrlo, el piloto andaluz se ha centrado en el objetivo de reducir la soledad no deseada, fomentar la actividad física y promover la estimulación cognitiva.

Para ello, se han implementado diversas soluciones tecnológicas:

• una red social que permite videollamadas, mensajes y promueve la interacción social
• un dispositivo de bolsillo para monitorizar la actividad física diaria
• una plataforma digital de estimulación cognitiva y rehabilitación neuropsicológica

Los resultados obtenidos por este proyecto tras cinco años de investigación ponen de manifiesto su impacto positivo en el bienestar emocional y social de los y las participantes. Entre sus principales conclusiones cabe destacar el impacto positivo de la tecnología, que ha favorecido la interacción, estimulación y realización de diversas actividades, lo que ha contribuido al incremento de variables como:

• la felicidad
• el bienestar
• la reducción del tecnoestrés
• mejora de la calidad de vida de las personas mayores

Asimismo, este piloto, a nivel general, ha tenido un impacto significativo sobre la reducción de la soledad no deseada y el aislamiento social, dos desafíos frecuentes asociados al envejecimiento. Estos resultados ponen de manifiesto la importancia de proyectos como este, que implican un ecosistema, no solo tecnológico, sino también social, donde la interacción tecnología-personas es esencial.

Otro de los aspectos a destacar ha sido que el uso de la tecnología de monitorización de movimientos ha motivado a los y las participantes a ser más conscientes de su actividad física y a mantenerse en movimiento.

El despliegue del piloto andaluz del proyecto Pharaon se ha llevado a cabo en centros para personas mayores y hogares de personas usuarias de municipios ubicados en la provincia de Jaén, Granada, Málaga, Sevilla y Comunidad de Madrid, pertenecientes a Diputación de Jaén y la Comunidad de Madrid y gestionados, en su mayoría, por Macrosad.