Durante los próximos años AZTI y Onkologikoa llevarán a cabo un proyecto de investigación y desarrollo en el área de alimentación saludable y cáncer   Ambos centros trabajarán conjuntamente en la investigación de alimentos que puedan prevenir y reducir factores de riesgo de cáncer, así como alimentos adecuados para el paciente que ya ha sido diagnosticado.

geriatricarea alimentación saludable y cáncer
Rogelio Pozo, director general de AZTI, y Ander Urruticoechea, director general de Onkologikoa, han suscrito este acuerdo de colaboración

Y es que la alimentación juega un importante papel en la prevención del cáncer y también durante el transcurso de la enfermedad. Un tercio de la mortalidad por cáncer se debe a causas evitables como el consumo de tabaco y alcohol, el sedentarismo, la obesidad o una dieta poco variada y no equilibrada.
Por otro lado, una vez diagnosticada la enfermedad, mantener un buen estado nutricional resulta fundamental para prevenir la frecuente desnutrición asociada al proceso oncológico y obtener un mayor beneficio del tratamiento terapéutico.
Gracias a este acuerdo, que tiene una duración de tres años, AZTI trabajará en la investigación de productos personalizados; realizará el análisis de lipidómica de membrana (un análisis de sangre que permite conocer el estado de salud de una persona en base a los ácidos grasos que incorpora en su dieta) para caracterizar los segmentos de población en las enfermedades con las que trabaja Onkologika; y desarrollará alimentos, suplementos y porciones para estudios de intervención en el centro.
Onkologika, por su parte, se centrará en investigar cómo afecta el cáncer en la digestibilidad y absorbabilidad de nutrientes y cómo paliar las alteraciones sensoriales que inciden en la nutrición de los pacientes.

Atención a las alteraciones sensoriales y preferencias alimentarias

Hay que tener en cuenta que hasta un 30% de los pacientes con cáncer ha perdido peso antes del diagnóstico y aproximadamente el 80% de los pacientes con cáncer avanzado sufre una pérdida de peso superior al 10% en el curso de la enfermedad. Entre los efectos secundarios asociados al tratamiento de quimioterapia y que pueden tener un impacto sobre la alimentación del paciente se encuentran las náuseas/vómitos, alteraciones del gusto y olfato, aparición de llagas en la boca, sequedad bucal, diarrea/estreñimiento, dificultad para la deglución o la anorexia.
El mejor conocimiento de estas alteraciones sensoriales, junto con los requerimientos nutricionales específicos, plantea el reto de diseñar alimentos específicos para pacientes de cáncer en tratamiento de quimioterapia, adaptados tanto a sus necesidades sensoriales como nutricionales. El objetivo es ayudar a un mejor estado de salud general mediante una alimentación óptima para prevenir la malnutrición, así como afrontar los tratamientos terapéuticos.
En la actualidad, los productos alimenticios específicamente diseñados para los pacientes oncológicos son hiperproteicos e hipercalóricos, con texturas adaptadas a problemas de deglución y masticación. Estos productos, que también se emplean en el campo geriátrico, habitualmente se presentan en formato batido.

Uno de cada dos hombre y casi una de cada tres mujeres tendrá cáncer a lo largo de su vida

Sin embargo, no existe una oferta de productos que tengan en consideración los requerimientos sensoriales y las preferencias alimentarias de los pacientes oncológicos, manteniendo al mismo tiempo el aporte nutricional necesario. En este contexto, AZTI trabaja en el diseño de nuevos alimentos que estimulen la sensorialidad alterada a través de una experiencia multi-sensorial, favoreciendo una óptima nutrición y mejora del estado de ánimo, y por tanto de salud, gracias al incremento de la sensación de placer durante la alimentación del paciente.
El cáncer supone un importante problema de salud pública a nivel mundial, tanto por su alta incidencia como por su elevada morbi-mortalidad. En los últimos 20 años, el número de tumores diagnosticados ha experimentado un crecimiento constante en España debido al aumento poblacional y también a las técnicas de detección precoz y al aumento de la esperanza de vida, ya que el riesgo de desarrollar tumores aumenta con la edad. Según el informe anual editado por la Sociedad Española de Oncología Médica, uno de cada dos hombre y casi una de cada tres mujeres tendrá cáncer a lo largo de su vida.
AZTI se dedica a la investigación alimentaria, ofreciendo soluciones innovadoras a la industria alimentaria para desarrollar nuevos o mejorados productos en los que prime la calidad, la seguridad y la identidad alimentaria.  Por su parte, Onkologikoa tiene por objeto promover la mejora de la calidad de vida y de la salud de los ciudadanos, mediante la prestación de un servicio sanitario de calidad y especializado en la prevención, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades de origen oncológico.