Investigadores del CIBER-BBN han desarrollado un dispositivo biosensor que permite la monitorización de los anticoagulantes como el Sintrom (acenocoumarol) y poder lograr así una terapia personalizada en la que el paciente o su médico puedan regular la dosis y conseguir el efecto óptimo.

geriatricarea Sintrom
Este dispositivo biosensor automatizado puede ayudar a ajustar la dosis de anticoagulante oral de forma individualizada

 
El grupo NanoB2A, que lidera Laura Lechuga en el Instituto Catalán de Nanociencia y Nanotecnología-CSIC, con la investigadora del CSIC Laura Lechuga al frente, ha diseñado un dispositivo plasmónico, que contiene unas nanoestructuras de oro en las que se pueden unir bioreceptores específicos que detectan biomarcadores de una manera reproducible y exacta, necesitando sólo una pequeña muestra de sangre del paciente, sin necesidad de realizar un tratamiento previo.
Anteriormente, el grupo Nb4D del CIBER-BBN y el CSIC, liderado por la investigadora Pilar Marco, había producido anticuerpos específicos capaces de reconocer Sintrom y demostrado su utilidad en un estudio clínico utilizando una técnica inmunoanalítica de alta capacidad de procesado de muestras.
Estos resultados apuntaron al interés de desarrollar un dispositivo biosensor automatizado que pudiera ayudar a ajustar la dosis de este anticoagulante oral de forma individualizada. La colaboración entre ambos grupos del CIBER-BBN ha permitido llegar al resultado que recientemente ha sido publicado en la prestigiosa revista Biosensors and Biolectronics.
geriatricarea anticoagulantes NanoB2A
El grupo de investigación NanoB2A liderado por Laura Lechuga

Tal y como indica la investigadora del CIBER-BBN Laura Lechuga, “estudiamos las condiciones óptimas para desarrollar este dispositivo biosensor obteniendo una excelente sensibilidad para detectar el anticoagulante, lo que nos indica que es posible medir concentraciones muy bajas de este fármaco”.

Este dispositivo es muy adecuado para su uso en centros clínicos para mantener una medida constante del anticoagulante o, incluso, para el autocontrol de la medicación

Por lo tanto, al ser una tecnología cuantitativa y altamente sensible, este diseño de los investigadores del CIBER-BBN es muy adecuado para su uso en centros clínicos para mantener una medida constante de este medicamento o incluso para que los propios pacientes puedan realizar el autocontrol de la medicación, algo clave en personas medicadas con anticoagulantes.
A  los pacientes que padecen una enfermedad cardiovascular o un desorden tromboembólico se les debe suministrar anticoagulantes como el Sintrom para evitar que se formen coágulos, pero este tratamiento tiene riesgos, explican las investigadoras del CIBER-BBN.
“Por ejemplo, si la dosis es baja, no tendría el efecto requerido y puede producirse coagulación de la sangre y por el contrario, si la dosis es muy alta puede desencadenar otro tipo de efectos secundarios como hemorragias internas, y esto se debe a que la dosis adecuada depende de muchos factores como el peso, edad, alimentación e interacción con otros medicamentos”, advierten desde el CIBER-BBN.